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Las ráfagas de viento de hasta 90 kilómetros por hora reavivaron el fuego en la Sierra de Santiago, en Nuevo León, por lo que desde anoche han sido desalojadas unas 800 personas de las comunidades de San Isidro, Laguna, El Alto, El Charro, Tejocote, El Pinal, El Hondable y Ciénega de González.
Según las autoridades estatales, se había logrado un avance del 20 por ciento en la liquidación del fuego, y el 15 por ciento en el control, pero este miércoles se avivó de nuevo el incendio; hasta ahora son ya cerca de 2 mil 700 hectáreas consumidas.
Este incendio forestal comenzó desde el 16 de marzo en Coahuila y se extendió a Nuevo León, ambos estados han declarado emergencia, por la cercanía con zonas habitadas.
En redes sociales, el gobernador del estado, Jaime Rodríguez Calderón, compartió que Protección Civil informó desde ayer que el fuego ha avanzado y exhortó a la población a mantenerse alerta a las indicaciones de las autoridades a través de Facebook y Twitter.
Estas condiciones climatológicas también complican las acciones de los cuerpos de bomberos y rescate, por lo que las labores por tierra y aire se vieron afectadas; incluso, por seguridad, las aeronaves que realizan las operaciones de combate al fuego debieron permanecer en el helipuerto de Laguna de Sánchez, en Santiago.
