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Agustín García Reyes, El Chereje, uno de los presuntos jefes de sicarios de Guerreros Unidos que presuntamente participó en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, declaró a la Fiscalía General de la República (FGR) que el ex director de la Agencia de Investigación Criminal (AIC),Tomás Zerón de Lucio, lo obligó a mentir para que pareciera que él arrojó las bolsas con restos óseos en el Río San Juan, en Cocula, Guerrero, mismas que fueron halladas el 28 de octubre de 2014.
En entrevista rendida el 5 de febrero de 2020 ante la Unidad de Investigación y Litigación del Caso Ayotzinapa, El Chereje aseguró que Tomás Zerón le dijo “… tú hijo de tu puta madre, te voy a llevar al Río San Juan para que hagas lo que te voy a decir” (sic). Aseguró que se le pidió hacer una simulación “de que como si hubiera tirado las bolsas de los estudiantes”.
‘Haz ahora lo que ya te dije’
En el helicóptero que partió el 28 de octubre de las instalaciones de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (Seido) en la Ciudad de México con rumbo a Cocula, el ex director de la AIC, según García Reyes, comenzó a gritar: “hijos de su puta madre, ahorita que ya lleguemos ya quiero que hagan las cosas tal y como les dije, sino que ahorita que vengamos de regreso los voy a aventar del helicóptero…”.
Una vez que El Chereje bajó del helicóptero fue conducido hacia un lugar donde le enseñaron unas bolsas.
“Me percato que había unas bolsas de plástico, cerca de un árbol, es decir, no estaba dentro del río, ya que en un momento me di cuenta de que las habían sacado del río. También, veo que hay gente vestida de blanco, como astronauta, que estaban cerca de las bolsas de plástico y al estar cerca del río me dice (Tomás Zerón) ‘ahora, haz ahora lo que ya te dije’, entonces hago como que aviento las bolsas al río y en todo momento estaba sometido por el escolta, ya que siempre me estuvo agarrando del pantalón, en eso escucho que le avisan a los periodistas, entonces el mamadito me echa un saco en la cabeza y me sacan de ese lugar y me suben a una camioneta y me llevan rumbo al basurero de Cocula».
La entrevista sirvió como dato de prueba para solicitar la orden de aprehensión contra Tomás Zerón, por los presuntos delitos de tortura, desaparición forzada de personas y contra la administración de la justicia, mandamiento judicial también se giró a otros agentes por los mismos delitos.
De la casa al helicóptero
El Chereje relató que fue detenido el 27 de octubre 2014, a las 03:00 horas en su domicilio particular, ubicado en Puente Río San Juan, en Guerrero, por supuestos elementos de la Policía Federal Ministerial, que lo sacaron de su casa y lo llevaron a diversos lugares, para posteriormente, subirlo a un helicóptero y trasladarlo a las oficinas de la Agencia del Ministerio Público de le Federación adscrita a la Unidad Especializada de Investigación de Delitos en Materia de Secuestro de la Seido.
Manifestó que desde que fue detenido, los elementos aprehensores lo sometieron a actos de tortura física y psicológica y amenazas, quienes también a base de palabras altisonantes y ataques físicos, le indicaron que tenía que decir que tuvo participación en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa y que pertenecía al grupo de Guerreros Unidos en el que tenía el rango de halcón.
«Vi gente armada; me dijeron que me tirara al suelo»
Además, que debía decir quiénes eran sus comandantes. Asimismo, dijo, que una vez que llegó a la Seido, le volvieron a recordar qué tenía que decir y que le hicieron firmar unos documentos de los que no sabía su contenido.
Agustín García narró que los agentes federales irrumpieron en su domicilio cuando estaba durmiendo con su esposa e hijo de seis años.
“…estábamos durmiendo, cuando escuché que comenzaron a tocar la puerta y a patearla, entonces yo me levanté, asustado abrí la puerta y al momento de abrirla, vi gente armada, eran como ocho o diez y me dijeron que me tirara al suelo, como estaba obscuro no los vi bien, sólo que estaban de negro, con uniformes, todos llevaban pantalón oscuro con bolsas a los lados, llevan camisola, iban armados y estaban todos encapuchados. Cuando dicen que me tiré al suelo, me tiré y entonces me dan una patada en el estómago, yo no sabía nada, yo decía”. Él les dijo que no sabía nada, que era campesino.
“…y ahí me empezaron a pegar, me preguntaban de los estudiantes ‘hijo de tu puta madre, dime ¿dónde están los estudiantes?’, llegaron en dos camionetas, recuerdo que eran como tres; en el momento que me subieron, levanté un momento la cabeza, yo iba en la parte de atrás, en medio de cada lado, iba un policía e iba sentado, me iban deteniendo del cuello y la cabeza, sólo vi a un sujeto con chaleco café o caqui, no lo pude reconocer porque no le pude ver la cara y todos se dirigían a él, era quien me habla y me decía en el trayecto ‘habla hijo de tu puta madre, no te hagas pendejo’, me dio unas cachetadas”, declaró.
“Sí jefe, yo voy a decir que sí participé en la quema de los estudiantes”.
Frente a un panteón en Cocula, se detuvieron las camionetas y le dijeron que “ahora sí vas a hablar”.
“…y me dieron una cachetada, me sujetan de atrás los brazos, una persona que no vi me puso una bolsa de plástico y me empecé a sofocar, no sé cuánto tiempo sería y no sé de dónde saqué fuerza, pero me zafé de las manos y rompí la bolsa porque sentía que ya me estaba ahogando, entonces ahí me dijeron ‘hijo de tu puta madre’ y entonces me esposaron y me pusieron boca arriba y llega el que dije que tenía el chaleco café y se sube encima de mi estómago y entonces me pone una rodilla en el pecho y me pone una bolsa más, y en esa sí perdí el conocimiento, era bolsas de plástico transparente.
Cuando fue puesto a disposición de la Seido, El Chereje aseguró que después ser sometido a tortura decidió decir: “sí jefe, yo voy a decir que sí participé en la quema de los estudiantes”.
Agencias
