Muertes de Covid-19 rebasa capacidad de los crematorios

El repunte de contagios de Covid-19 en Matamoros -que de acuerdo a la estadística de la Secretaría de Salud en el Estado, había llegado a mil 313 positivos al día de ayer, con 84 defunciones- ha provocado que se saturen los servicios de cremación que fueron asignados a dos empresas, por lo que ahora se procedería, de ser necesario, a sepultarlos en fosa común.

Por esta razón, en un semirremolque equipado con sistema de refrigeración que se estacionó a un lado del Hospital General “Dr. Alfredo Pumarejo Lafaurie”, se comenzaron a depositar los cuerpos de las personas que han fallecido por Covid-10, mientras la Secretaría de Salud determina su destino final, que hasta hace unos días era la cremación directa.

VAN 10
Aunque la SST no ha comunicado oficialmente el motivo por este cambio en los protocolos de atención a estos casos, la directora del Hospital Pumarejo, Irlanda Peña García, confirma que se han depositado los restos mortales de 10 personas en el citado frigorífico, por instrucciones de la superioridad, pero no adelantó que prosigue.
Por su parte, el empresario de servicios fúnebres, Mario Ramírez, informó ayer tarde que desde que se registraron los primeros decesos, el procedimiento fue la incineración de los cuerpos y posterior entrega de las cenizas a los familiares, ya que las autoridades sanitarias han determinado que aún después de fallecer, un paciente puede generar contagios, por tanto no era prudente que los parientes pudieran velarlo o cumplir con otras costumbres o rituales, según su cultura o creencia religiosa.
Grupo Escobedo Zerimar y Capillas San Joaquín, así como la funeraria El Rosario, fueron autorizados por el Estado para llevar a cabo este procedimiento a cargo del erario público, en apoyo a los deudos.

Superados
Pero la capacidad de los crematorios es limitada a tres o cuatro cuerpos en un día, pues sólo el procedimiento en el incinerador es de mínimo tres horas, más su rescate del hospital o del Semefo, y el asunto del “papeleo”.
Ramírez explica que durante los últimos días los contagios se incrementaron notablamente, se tuvieron hasta nueve decesos en un sólo día, ya no se tuvo la capacidad suficiente para cremar, así que la opción ahora es la inhumación en la fosa común.
“Sé del tráiler que está en el hospital desde hace como dos días, desconozco si ya estén depositando cuerpos allí, pero la Secretaría nos ha de notificar si ya se aplica la fase dos del procedimiento para darles destino final”, comenta.
Y auún cuando se sepulten, no habrá velación, el cuerpo será llevado de inmediato al panteón, por personal capacitado y con equipo que ha establecido la Secretaría de Salud.
Ramírez hizo un llamado a la población para que tome consciencia del riesgo de no tomar las medidas preventivas, de no cuidarse, esto es una realidad y se está viviendo aquí, donde la capacidad de las funerarias para cremar se ha rebasado, es imperativo que las personas se protejan, que no salgan de casa si no es necesario, o si lo hacen, que procuren el cubrebocas, el aseo de las manos, y la sana distancia.

Digno destino
Emiliano Escobedo Miller, director de Panteones, confirma que desde hace más de dos meses se habían habilitado más de 10 tumbas en Santa Cruz, en el ejido Las Rusias, para poder sepultar a las personas acaecidas por el Covid-19, en caso necesario.
Es lo que llaman la fosa común, pero no quiere decir que depositen todos los cadáveres juntos, cada uno tiene su fosa por separado, debidamente identificado.