Los Hechos

EN LOS BUEYES DE MI COMPADRE

Los bancos nada más hicieron la faramalla de que se solidarizaban con sus clientes, ante la circunstancia de excepción que ha significado la pandemia del coronavirus, impactando las economías de todo mundo.
Fuera de Banorte, que ofreció algunas quitas -sin haber entrado a la lectura de las letras chiquitas-, el resto de las instituciones, de propiedad extranjera por cierto, sí plantearon el posponer algunos pagos, pero cobro de intereses de por medio, otra vez, muy a su beneficio.
Hasta CARLOS SLIM HELÚ, quien ya nos había convencido de haberse sensibilizado, con su anuncio de que haría donaciones institucionales para afrontar la pandemia, ahora resulta anda cobrando “excedentes de internet” a los usuarios de Telcel y Telmex, por montos que superarán en mucho su falsa donación filantrópica.
El gobierno federal incluso, ha anunciado, en medio de la contingencia, anticipos en el ejercicio de su presupuesto, por el orden de los 11 mil millones de pesos, correspondientes al ejercicio de los meses de abril, mayo y junio.
¿Y gastado lo de los siguientes tres meses, que harán los entes públicos en los tres órdenes de gobierno a los que alcance “el beneficio”, cuando se le venga la hora de pagar las necesidades de esa temporada?
El diputado ERASMO GONZÁLEZ ROBLEDO, secretario de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública en la Cámara Baja del Congreso de la Unión, anunció que Tamaulipas recibe 256 millones de pesos correspondientes al ramo 12, Salud, para el Programa de Atención a la Salud y Medicamentos Gratuitos para la Población sin Seguridad Social.
A ver para qué alcanza.
La Comisión de Salud, pero en el Congreso local, ayer aprobó un punto de acuerdo mediante el cual exhorta a la Secretaría de Salud federal para que diseñe las políticas públicas necesarias para el abastecimiento de medicamentos en el Estado para el cuidado y atención de la salud de las y los tamaulipecos, específicamente al Instituto Mexicano del Seguro Social.
La promoción, de cuño panista, ameritó la intervención de la representación morenista en la comisión, reclamando que el mismo exhorto se hiciera extensivo a las instancias estatales, pero la moción fue desechada por los votos del PAN y del PRI, cinco, entre los siete integrantes.
“Hágase la justicia… en los bueyes de mi compadre”, reza el adagio popular.
En Jalisco, volvió a ser noticia la Farmacéutica HISA, de matriz victorense, luego que disolvió el contrato para surtir 40 millones de pesos en pruebas para detectar el coronavirus, al gobierno estatal emecista, “sin mediar explicaciones”.
El incidente fue ocasión para que los medios volvieran a repasar su historial comercial, desde 1999, cuando se fundó, por un par de veinteañeros tamaulipecos -de quienes luego sólo uno quedó como propietario absoluto-, con un crecimiento exponencial que le ha llevado a facturar, literalmente, ventas por miles de millones y no sólo de unidades de penicilina.
Tan no ha habido quien tire la primera piedra, como que entre sus clientes figuran los gobiernos federales del PAN, PRI y el actual MORENA, así como gobiernos estatales y municipales de las más variadas regiones geográficas, temporales y filias partidistas.
Pero de vuelta al trabajo en las comisiones legislativas locales, la Comisión de Justicia votó por unanimidad, sin mediar entrevista a la propuesta -como establece el canon-, la elección de la jueza riobravense ANA VERÓNICA REYES DÍAZ.
A las diputadas SARA ROXANA GÓMEZ y YAHLEEL ABDALA, del PAN y el PRI, sólo les preocupó que el oficio de la propuesta enviada por el presidente del Supremo Tribunal de Justicia estuviera dirigido a la Junta de Coordinación Política y no a la presidencia de la mesa de los trabajos del mes, encabezada por la primera.