ElBravo_Notas_728x90_1
«Iba saliendo a comprar comida cuando vi a los elementos del Instituto Nacional de Migración, que con engaños me llevaron a la camioneta; me dijeron que nos iban a revisar nuestros documentos y fue mentira, nos agarraron como si fuéramos delincuentes y nos trajeron a Villa Hermosa, en Tabasco; aquí estamos sin comida, sin agua, sin ropa, sin nada», narró una de las migrantes que fue asegurada por elementos de esta corporación el jueves por la mañana.
De manera confidencial se pudo dialogar vía telefónica con una de las 600 migrantes que llegaron hasta Tabasco el jueves por la tarde-noche, no sólo de Matamoros, sino de otras ciudades fronterizas en donde se llevaron a cabo redadas contra esta comunidad.
De acuerdo a la información que se ha dado a conocer en esta ciudad, fueron por lo menos tres unidades llenas de migrantes que salieron de Matamoros con rumbo a Reynosa, de donde las enviaron vía área a Villa Hermosa.
«Ellos nos habían dicho que nos iban a dejar tranquilos hasta que llegara nuestra cita, pero de igual manera nos metieron a las vans con mentiras, ya que nos dijeron que nos ayudarían, que nos iban a llevar a checar nuestros documentos, ver si en realidad estábamos pidiendo la cita por el CBP One, pero no fue así, nos arrestaron y nos trajeron acá; estamos a la bendición de Dios», dijo la extranjera afectada.
SIN DERECHOS
Aseguró que el migrante no tiene ningún derecho ante estas autoridades migratorias, se hace lo que ellos dicen, ya que de lo contrario, los amenazan con que los van a deportar, que fue lo que sucedió en esta ocasión.
Explicó que la redada del jueves no sólo fue en los alrededores del puente o del campamento, sino que lo hicieron en diferentes puntos de la ciudad, en donde saben que hay personas rentando casas. Estuvieron esperando a que salieran para llevárselos.
Afirmó que la mayoría de las personas que se llevaron de Matamoros estaba viviendo por la calle Primera y Bravo, y cuando algunos salieron a comprar de comer o a trabajar es que fueron detenidos por los elementos del INM.
Resaltó que, incluso, una vez que los echaron a la calle, frente a las instalaciones que son identificadas como un refugio para migrantes, la mayoría se quedó afuera tratando de sentirse protegidos, pero fueron corridos de ese lugar.
«Nos han venido mintiendo las autoridades, incluso nos dijeron que desde aquí (Tabasco) se puede tramitar la cita a través del CBP One, pero no es cierto, marca error e indica que tenemos que estar más hacia el norte o centro del país», según dice.
Separan familias
La entrevistada aseguró que con estas redadas muchas familias quedaron separadas, «Yo dejé a mi esposo y mi hija allá en Matamoros; ya teníamos dos meses viviendo en una casa que estábamos rentando y que estábamos esperando la cita, pero yo salí a comprar de comer cuando me agarraron y dejé a mi familia».
«No soy yo la única, hay más paisanos que están en la misma situación, dejaron a su familia allá en Matamoros, nos están separando de nuestros hijos y nuestra pareja», afirmó.
«Acá sólo nos espera la calle, el hambre, el buscar sobrevivir, hay niños y adultos enfermos, no nos han revisado médicamente, no tenemos nada de apoyo y nos dejaron sin nada», aseveró.
Agencias
