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16/07/2018.- Ante el elevado costo de la canasta básica que recientemente alcanzó un nuevo incremento del 13 por ciento, amas de casa y parte de los ciudadanos han encontrado en la elaboración de huertos caseros una alternativa para aminorar el golpe que la carestía en alimentos está provocando en el bolsillo.
De acuerdo con Carlos Homero de los Santos, gerente de la Asociación Mexicana para el Desarrollo Rural, revela que de acuerdo con las asesorías que dan para la creación de un sistema de cultivo casero, se tienen detectados un promedio de 40 invernaderos debidamente instalados y un total de 150 personas que están iniciando esta técnica en sus hogares, los cuales son instalados en azoteas, patios traseros y cocheras.
En entrevista comenta, “hay un serio problema en la generación de alimentos tanto a nivel nacional como internacional, por lo que esta situación está ocasionando que la comida eleve sus costos, ya que al escasear o caer producciones sus valores se elevan y se hace cada vez más complicado alimentar a la gente tanto con granos como con vegetales”, advierte.
Asegura que esta práctica surgió desde 1995 y ante la fuerte crisis económica ha tomado más auge en todas las clases sociales, ya que cientos de familias de Matamoros hoy en día están buscando con ello mejorar su situación económica y reducir con ello el gasto en la compra de alimento con una inversión mínima de 3 mil pesos.
Entre los productos que más se siembran, el representante de dicha agrupación revela que es la acelga, zanahoria, papa, tomate e incluso el limón que es uno de los artículos con el mayor precio en el mercado está dado frutos en casas de la ciudad.
Generador de ingresos
Y es que esta alternativa no solamente se convierte en una opción para ahorrar y evitar el fuerte golpe de los precios en alimentos, ya que además se convierte en un importante generador de ingresos, ya que este tipo de alimentos que son sembrados en casa, están libres de agentes químicos, lo que hace de ellos un atractivo para su comercialización.
En este sentido Homero de los Santos comenta, “en estos proyectos igualmente se registran excedentes, los cuales muchas de las personas los comercializan con vecinos, lo que cubre en cierta medida una parte de la demanda económica de los micro productores”, señala.
Ahorro en gasto familiar
En la experiencia de Sonia Rivera Serrano, productora casera de alimento y asistente técnico de Fundación Mexicana del Desarrollo Rural, asegura que su pequeño huerto que tiene en el patio de su casa con medidas de 3 x 3 metros cuadrados, le ha retribuido un ahorro de hasta el 60 por ciento en el gasto familiar, ya que asegura son mínimos los productos de la canasta básica que compra en los mercados populares.
Añade al respecto que este gusto por la producción propia de sus alimentos surge por los constantes cambios de precios y los escasez de alimento que se padece actualmente, y del cual está recibiendo también ganancias por la producción que su pequeño sembradío le genera.
Agencias
