Rochín renuncia a Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas

El comisionado Ejecutivo de Atención a Víctimas, Jaime Rochín del Rincón, presentó al presidente Andrés Manuel López Obrador su renuncia al cargo por considerar que la política nacional de atención a víctimas «debe impulsarse desde un nuevo liderazgo».

La renuncia será efectiva a partir del 15 de junio, informó Rochín del Rincón en su carta de dimisión.

Jaime Rochín fue nombrado en 2013 como Comisionado Ejecutivo por el Senado.

​La CEAV es el órgano operativo del Sistema Nacional de Atención a Víctimas y es un organismo especializado para brindar atención a las personas que sufren delitos o son víctimas de violaciones de derechos humanos.

La comisión tiene la función de proponer políticas públicas de prevención de delitos, protección, asistencia y reparación integral, de acuerdo con la Ley General de Víctimas.

En su carta de renuncia, Jaime Rochín aseguró que es indispensable reforzar los mecanismos institucionales para atender las víctimas, así como fortalecer al equipo de asesores jurídicos, en lugar de debilitarlos.

“Se necesita fortalecer al equipo de personas asesoras jurídicas preparadas y bien pagadas, en lugar de debilitarlo con medidas administrativas que devienen en la reducción de calidad de la atención de los casos y, por ende, en el agravamiento del complicado camino de las víctimas hacia la justicia”, escribió

Rochín del Rincón demandó un compromiso eficaz del Estado hacia las víctimas, “más allá de las palabras”.

El comisionado Ejecutivo destacó que sin la colaboración de su equipo la reparación colectiva a las víctimas del Movimiento del 68 y de la Guerra Sucia no hubieran sido posibles, así como tampo los estudios a las víctiikmas de Allende, Coahuila y San Fernando, Tamaulipas.

Además del análisis de las fosas clandestinas de Tetelcingo y el análisis de las condiciones de los servicios forenses del país.

También destacó la reparación integral en el caso de las violaciones a los derechos humanos de la periodista Lidya Cacho y en el caso Tierra Blanca, en los que también lograron una disculpa pública.

“Me voy con la certeza de dejar a una institución que logró pavimentar el azaroso camino ante ella, haciéndolo más transitable para las víctimas; convencido de que se trabajó con oportunidad, contundencia y, sobre todo, con un profundo compromiso hacia las víctimas, su dignidad y derechos”, dijo.

Mi encargo ha cumplido su ciclo, dijo.

Agencias