Repunta la demanda de modistas locales

11/08/2016 – Respondiendo a la demanda de mano de obra para el ajuste de prendas de vestir, en su mayoría faldas, blusas o vestidos, así como la confección de ropa nueva, se han mantenido con regular trabajo las costureras de esta cabecera municipal, reflejándose un repunte importante a partir de esta semana, a efecto de la necesidad de manufactura de uniformes para el ciclo 2016-2017.

Tienen trabajo
Modistas de la localidad señalaron que posterior a la alza en la demanda de elaboración de prendas para los festivales del fin de ciclo escolar pasado, algunas se dieron un descanso, en tanto otras manifestaron que en este lapso pudieron ocuparse en la confección de prendas solicitadas por público en general, más que nada por mujeres, como lo son blusas, faldas o atavíos completos, ya sea de corte formal, de media gala o de noche.

Demanda de servicio
Algunas de las costureras más exitosas en base al arte con que realizan su labor, argumentaron que de hecho ya se les ha reservado para algunos trabajos de manufactura de uniformes, por parte de madres de familia. “Inclusive en lo particular ya me han traído la tela para uniformes de alumnos de primaria y de secundaria, y estoy a punto de empezar a hacerlos, ya sólo termino unas blusas y me enfoco a empezar con las costuras escolares”, señaló la señora Iracema, en lo que coincidieron otras modistas incluidas en la entrevista. Asimismo concordaron que ésta al igual que las temporadas de fin de cursos escolares y las fiestas revolucionarias son las etapas en que mejor les va en cuestión de la demanda de la mano de obra que ellas ofrecen, a forma en que se sobresaturan tanto que se ven en la necesidad de rechazar trabajo, con tal de no quedar mal mediante retraso en las entregas de las prendas. Añadieron que en también, aunque en menor grado, figuran las fechas en que se realizan festivales municipales o escolares, etcétera.

Pericia en labor
A la vez citaron que por lo regular se mantienen siempre con buena demanda de la prestación del servicio, sobre todo las que han logrado la fama de ser buenas en la labor, sin embargo, hay etapas en que se ven saturadas más de lo normal, así como se pueden dar el gusto de descansar por temporadas, máxime cuando se preocupan por mantener buen estado de salud. Sobre la temática explicaron: “aunque nos agrade mucho la labor que realizamos, es tensión el esfuerzo por realizar un buen diseño, más todavía al tratarse de clientela difícil, y también es muy fatigante para nuestro organismo por la postura que se requiere en forma constante y la vista se cansa”. Cabe mencionar que hay quienes optan por uniformes de segundo uso en regulares o buenas condiciones, que resulta más barato, más cuando no requieren de ajustes.

Javier Manilla