Orbe

FGCV: orden, justicia y desarrollo

24/09/2018 – Los dos primeros años del cambio político y social, de cuyo devenir en Tamaulipas dio cuenta el pasado viernes el Gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, son una prueba de que la voluntad del pueblo y sus líderes ha sido capaz de enfrentar la terrible cabeza de la hidra.
Un monstruo que, es indispensable recordar, fue no sólo repudiado sino desafiado por la mayoría de los tamaulipecos el 5 de junio de 2016, derribando la perversa programación que detonaba una costumbre mental reacia a su fin.
Si bien esto inicialmente incluía los colores partidistas, todos sabíamos que el mal no se ocultaba ahí.
Fue el demonio de la corrupción y la violencia que durante tanto tiempo se hizo pasar por una divinidad que debía ser adorada, mientras devoraba todo lo que su malignidad le permitía.
El reto que enfrentó Francisco García Cabeza de Vaca comenzó a dar los resultados proyectados.
Viene ahora la historia prometida con la que pasaríamos de padecer aquella raquítica democracia, a un sólido sistema político donde la ciudadanía tenga una voz participativa.
Esto es, el pleno derecho (y no sólo lo que define la letra legal) de intervenir en las cosas públicas, en las decisiones políticas, en las discusiones de los temas álgidos, incluso en los errores donde solemos culpar a los ciudadanos elegidos para gobernar, ignorando el refrán de que no es lo mismo ver al diablo que enfrentarlo.

CONSTRUYENDO EL FUTURO
El mérito del actual gobierno estatal es haber arribado en uno de los peores momentos por los que ha atravesado Tamaulipas a lo largo de su historia.
Y además de enarbolar siglas y colores partidistas completamente nuevos en el ámbito político desde el poder, comprometerse a renovar toda la estructura gubernamental. Lo que no sólo sería un enorme logro que pasaría a la historia de la entidad si además se instalan las condiciones que eviten, en forma definitiva, la formación de otra estructura igual o peor a la desmantelada.
Y pese a los cambios que también se generan en el plano nacional, con un nuevo presidente de la República con proyectos muy esperanzadores para el pueblo, la impresión es que el gobierno de Tamaulipas irá avanzando en un cambio que todos sabemos no es ni será empresa sencilla y cómoda de llevar a cabo.
A la convicción y certeza de Francisco García Cabeza de Vaca de estar poniendo orden al concluir su segundo año de gobierno, y dirigirse hacia adelante “con la mirada bien puesta en un nuevo horizonte de paz, respeto a la ley, justicia y desarrollo social y económico”, es fundamental el apoyo de la sociedad tamaulipeca.
El mismo apoyo de aquel 5 de junio de 2016 con el que todos estaremos construyendo el futuro, esperando sea el mismo de ahora y con el que se cerraría la pinza del proyecto de un cambio que exige remos poderosos en ambos lados de la embarcación, a fin de avanzar e ir en la dirección correcta y no navegar contra la corriente.

VIENE UN CONFLICTO FEDERAL
Hace unos cuantos días, cuando el presidente del Consejo Estatal de Morena, José Antonio Leal Doria, trascendió que aún no había nada para nadie en las delegaciones federales, se percibió podría desatarse en Tamaulipas un conflicto generado por la ausencia de un liderazgo político de ese partido.
Se sabe que desde diferentes frentes son muchos los que están a punto de desencadenar una disputa por las delegaciones. Y mientras unos recomiendan a los que pudieran ser los nuevos delegados, otros llegan al punto de recomendarse a ellos mismos, sin considerar la grieta en la que ya está atrapado Andrés Manuel López Obrador al descubrir que no podrá cumplir la mayor parte de sus promesas de campaña.
Sin embargo, a las grillas de Morena nada les preocupa que AMLO deje de hacer historia. Sólo van por la representación federal como refugio para tantos que han estado lejos de las nóminas oficiales.

RECTOR RECONOCE II INFORME
La Universidad Autónoma de Tamaulipas, a través del rector José Andrés Suárez Fernández, reconoció que los resultados del Segundo Informe del Gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, marcan la pauta para seguir avanzando en la formación de los recursos humanos que necesitan los retos de la entidad. Recordó que la UAT tiene bien alineado su plan institucional con el plan estatal de desarrollo, por lo que el informe define muy bien la línea de cómo ha avanzado la UAT en este primer año.
¡Excelente inicio de semana!