» No soy Eugenio, soy su hermano», respondió al salir de restaurante

Nuevo León, 07/07/17.- Mientras el Departamento de Justicia de Estados Unidos lo busca por tres cargos federales, Eugenio Hernández, ex Gobernador del PRI en Tamaulipas, se paseó ayer por San Pedro y hasta convivió con «amigos» en un restaurante, publicó este viernes El Norte-Reforma.

Hernández sostuvo un encuentro con al menos cuatro personas en el restaurante El Varietal, en la Plaza GM3, sobre la Avenida Gómez Morín, se lee en la nota del periodista Juan Carlos Rodríguez.

Ahí descorchó dos botellas de vino tinto que mandó comprar a otro negocio.

El priista llegó al local cerca de las 17:00 horas y se sentó en una mesa colocada en un rincón, desde donde estratégicamente observó quién entró y salió del inmueble, se agregó.

Ahí, convivió con cuatro personas y hablaron de «asuntos federales».

Al percatarse de la presencia de los reporteros, uno de los «amigos» de Eugenio Hernández se dirigió a ellos y luego de saludarlos para tratar de obtener sus nombres y profesión, se identificó como «comerciante texano».

Pero al no obtener respuesta se marchó del negocio escoltado por dos camionetas Suburban en color blanco y blindadas.

Eugenio Hernández se quedó en el interior del negocio con una tercera persona a la que se lo «encargaron mucho» y con quien sólo charló un par de minutos.

Posteriormente se dirigió a otra mesa del restaurante donde saludó a otras dos personas y se quedó a charlar con ellos poco más de 15 minutos.

El ex Gobernador fue abordado al salir del local pero rechazó hacer comentarios fingiendo ser su hermano.

-Señor Eugenio, buenas tardes, ¿nos podría conceder una entrevista?

«¡Nombre!», respondió, «yo soy hermano de Eugenio», expresó mientras abordaba un BMW de la serie X4 cuyo valor va desde 800 mil hasta un millón 200 mil pesos.

El priista fue Gobernador en Tamaulipas del 2005 al 2010.

Estados Unidos renovó el pasado 8 de febrero una orden de aprehensión en su contra que existe en ese País desde el 2015.

Es buscado por el Departamento de Justicia luego de que la Corte Federal del Distrito Sur de Texas, con sede en Corpus Christi, instruyó su captura por lavado y transmisión ilegal de dinero.

Recientemente se añadió un tercer cargo por defraudación bancaria.

Según las indagatorias, Hernández habría engañado al National Bank y al Lone Star National Bank de McAllen, y al International Bank of Commerce de Laredo para acceder a productos como créditos, acciones y otros activos.

Además, fue acusado de mantener vínculos con una red de lavado de dinero de grupos crimínales.

Pese a las acusaciones el ex mandatario no es buscado en México por la PGR.

Otro caso por el que se le investiga en Estados Unidos es por las declaraciones de Luis Carlos Castillo Cervantes, «El Rey de los Dragones», quien es investigado por lavado de dinero y lo señaló como uno de los Gobernadores que en funciones le cobró «diezmo» por las obras que realizaba.

A estos se suman también las declaraciones del empresario Guillermo Flores Cordero que hizo en Estados Unidos y que lo vinculó a una red de lavado de dinero donde le «lavaba» a Hernández los sobornos que recibía de delincuentes.

Tras la captura del ex gobernador Roberto Borge en Panamá, acusado de lavado de dinero, Hernández Flores abandonó Cancún, que se había convertido en su refugio.

En Quintana Roo, su aún legalmente esposa, Adriana González Lozano tiene una mansión en el exclusivo fraccionamiento Puerto Cancún, frente al Caribe, con un valor de 120 millones de pesos.