Juez deja libre a ebrio que atropelló a menor

19/11/18.- Un pescador que ebrio y amanecido chocara contra dos vehículos y un puesto de tacos arrollando a un menor al que le ocasionó fractura de cráneo y estallamiento de vísceras quedó en libertad luego de que el juez de control determinara que el detenido no iba a poder pagar por los gastos médicos que generara la atención del menor.

Fue ayer por la tarde que Francisco Pozos, un pescador de los Estados Unidos, señalado como responsable de atropellar y causar graves lesiones al pequeño Jeovany Rivera fuera llevado ante el juez de control, ante quien aceptó su responsabilidad de los hechos que mantienen entre la vida y la muerte al menor, el que fue trasladado a un hospital de especialidades de Monterrey en un intento de sus familiares por salvarlo de las garras de la muerte.
A pesar de que el pescador es ciudadano norteamericano y que existe el riesgo de que se evada a la acción de la justicia, el juez de control vinculó a proceso, pero no otorgó la prisión preventiva en contra del pescador, argumentando que el detenido no podría cubrir los gastos que genere la atención del menor.

Otorgan libertad
La abuela de Jeovany, llorando pedía que no lo dejaran en libertad, pues existía el riesgo de que ya no lo volvieran a ver, pero el juez se mantuvo rígido en su decisión y otorgó la libertad al pescador.

Se argumentó que Francisco Pozos, tras provocar el aparatoso accidente que casi le cuesta la vida no escapó del lugar, pero testigos coinciden que no escapó por lo ebrio que andaba.

Las medidas cautelares
El pescador tendrá que depositar 50 mil pesos en los próximos diez días y cada sábado tendrá que acudir a firmar el libro de cauciones y para salir del país tendrá que notificar al juez, siempre y cuando la salida sea para generar ingresos que ayuden a cubrir los daños ocasionados.

Un milagro para Jeovany
Por su parte, el estado de salud del menor atropellado es considerado como muy grave, pues aunque ya se le intervino del bazo, aún su estado de salud es considerado como muy grave, pues presenta hundimiento de cráneo, el que le resultó al ser prensado cuando almorzaba unos tacos de barbacoa en el puesto en el que también resultó lesionado el joven Marco Antonio Villanueva, quien trató de cubrir al menor, pero aún así resultó con las graves lesiones que lo mantienen entre la vida y la muerte.