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25/08/2016 – Reynosa.- La mayoría se dedican a solicitar caridad en sitios concurridos, fuera de los cajeros electrónicos, de los centros comerciales o de oficinas de gobierno. Otros prefieren husmear entre la basura de los restaurantes en busca de algún mendrugo de pan. Para instituciones como la Fraternidad Internacional de Hombres de Negocios (FIHNEC), es necesario legislar para que dichas personas sean atendidas de manera adecuada, ya sea por sus familiares -si éstos cuentan con suficientes recursos económicos-, o por parte de instituciones públicas.
Necesidades
Juan José Longoria, vocero de FINHEC, destacó que por desgracia, muchos de estos individuos, hombres y mujeres, acostumbran salir a las calles debido a que sus familias carecen de estabilidad económica para hacerse cargo de los gastos que generan. Gastos como medicamentos, consultas médicas, alimentación, ropa y un espacio adecuado, son necesarios para evitar que se conviertan en un problema social, como hasta ahora lo son. «Desgraciadamente no todos tienen las posibilidades económicas para brindarles atención», apuntó. A su juicio, se debe legislar para que los familiares con recursos suficientes se hagan cargo de ellos. En caso de que no exista esa posibilidad, se tendría que aplicar un estudio socioeconómico a fin de que sea el Estado el que se haga cargo de ellos. Un caso parecido es cuando adultos mayores y niños se ven obligados a salir a la vía pública en busca de su diario sustento. Se acerca la temporada invernal y el problema se incrementa por las condiciones climáticas extremas que ponen en riesgo la vida de este sector vulnerable de la población.
Agencias
