Mediante un comunicado, el Gobierno de Texas anunció la instalación de una barrera acuática en el Río Bravo para evitar más cruces de inmigrantes por esa vía.
“El gobernador Greg Abbott, el Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS) y la Guardia Nacional de Texas continúan trabajando juntos para asegurar la frontera; detener el contrabando de drogas, armas y personas a Texas; y prevenir, detectar e interceptar el comportamiento delictivo transnacional entre los puertos de entrada”.
Abbott ha sido un duro crítico de las políticas del presidente Joe Biden, de quien dijo que ha mostrado una negativa de asegurar la frontera, “lo que permite el paso inmigración ilegal, armas y drogas mortales, que ingresan desde México”. Por ello anunció el despliegue de nuevas barreras marinas flotantes para impedir los cruces ilegales en puntos críticos a lo largo del Río Bravo.
Esta estrategia evitará de manera los cruces ilegales entre los puertos de entrada al dificultar el cruce del río y llegar al lado de Texas de la frontera sur. Los primeros 1000 pies de la barrera marina flotante se desplegarán cerca de Eagle Pass.
“Estoy firmando seis proyectos de ley de la sesión ordinaria de este año para garantizar que Texas podemos continuar haciendo aún más para detener la inmigración ilegal en nuestra frontera sur y proporcionar nuevas herramientas a los valientes hombres y mujeres a lo largo de la frontera sur para proteger a los tejanos y estadounidenses del caos y la crisis de la frontera”, dijo Abbott.
La Operación Lone Star continúa llenando los peligrosos vacíos dejados por la negativa de la Administración Biden a asegurar la frontera. Cada individuo que es aprehendido o arrestado y cada gramo de droga incautada habría llegado de otro modo a las comunidades de Texas y de la nación debido a las políticas de fronteras abiertas del presidente Joe Biden.