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En una sorpresiva revisión que personal de Coepris y de la Dirección del Transporte Público hicieron en las unidades de pasaje urbano, pudieron apreciar que aunque en algunas actividades se han relajado las medidas sanitarias, los choferes se han mantenido estrictos con las normas que se les impusieron desde el año pasado.
Y es que entre multas económicas y suspensiones de tres o más días en la ruta, los operadores han entendido que es más conveniente “irse por la derecha” porque de no hacerlo tendrán una repercusión en el bolsillo, donde sí les duele.
Prohibido subirse sin cubrebocas
Ariel García, subdelegado de Transporte de la Secretaría de Seguridad Pública, informa que en las “peseras” no se permite abordar sin cubrebocas, como tampoco saturar las unidades en la ruta, situación que se viene aplicando desde el inicio de la pandemia, no es algo que desconozcan, por lo cual no se les tienen ya consideraciones en caso de sorprenderlos en desacato a alguna disposición.
A los concesionarios también se les llegaron a aplicar medidas de apremio porque no contaban con las medidas básicas de seguridad en salud, como los contenedores de gel antibacterial, la separación de asientos con acrílico, así como respetar los horarios de servicio, que en estos días no está limitado.
Al menos por esta ocasión, dijo, no se les detectaron anomalías, quiere decir que han entendido que deben contribuir para mantener la seguridad sanitaria de sus usuarios, pues mientras no se les notifique que puedan suspender sus protocolos, deberán continuar aplicándolos constantemente.
Agencias
