6/02/2017 – Si tienes al rival al borde del nocaut debes aniquilarlo. Si no lo haces, un equipo grande como Patriotas te acaba. Y así los Pats son campeones de la NFL: anotando 31 puntos en la segunda mitad.
La defensiva de Atlanta llegó a este juego admitiendo 13 puntos en promedio en la segunda mitad de los juegos, no supo cambiar eso y Brady los acabó. El acarreó de dos yardas de James White con el que explotó la celebración en el Estadio NGR y en Boston, fue la culminación de un espectacular regreso de los Patriotas, que confirmaron que son históricos en todos los sentidos.
Patriotas entró al último cuarto con una desventaja de 28-9 pero sumó un gol de campo y dos anotaciones con conversión de dos puntos para lograr el milagro de empatar el juego en el que perdían por 19 puntos al llegar al último periodo.
Y en el tiempo extra, el primero en la historia en un Super Bowl, ganaron el volado y ahí estaban aniquilados los Halcones. Siete jugadas y 73 yardas después, estaban en la yarda 2 del rival. James White corrió por el lado derecho y luego de mantenerse de pie tras un intento de tacleo, logró cruzar el plano. Touchdown. El touchdown del triunfo. El touchdown para el quinto título en la historia del equipo. El quinto para Brady y Bill Belichick.
“Ahora por quinta vez, los Patriotas son campeones”, gritó el dueño de los Pats, Robert Kraft.
“Todo se lo debemos a los jugadores, compitieron como guerreros en todo el juego”, explicó Bill Belichick durante los festejos. “Teníamos que competir durante los 60 minutos, eso fue lo que nos mantuvo fuertes, competir los 60 minutos”.
“Hubo muchas jugadas, no sabíamos cuál podría ser la diferencia. Estoy muy orgulloso de todos en el equipo, somos un gran grupo”, explicó Brady. “Llevamos esto (el trofeo) a casa”.
Empezó pintado de rojo y negro
Si te equivocas en la NFL te puede costar puntos, pero si lo haces contra los Halcones, peor noticia, porque te hacen pagar. Equivocarse dos veces les costó 14 puntos a los Patriotas.
En la temporada el equipo de Atlanta anotó 92 puntos después de haber recuperado el balón, el #6 de la liga, y la defensiva de los Halcones le hizo pagar a los Patriotas.
Y no es obra de la casualidad.
El enfoque de buscar el balón en cada jugada en los entrenamientos y las horas de análisis de videos se transformaron en dos balones recuperados para los Halcones.
Cuando D. Jones se dio cuenta de que LeGarrette Blount no iba a avanzar más yardas, fue a buscar el balón y se lo sacó al corredor. El ovoide quedó libre y Robert Alford se lanzó para no dejar escapar.
Cinco jugadas después, con series sin reunión, los Halcones le hicieron pagar a los Pats con el espectacular acarreo de anotación de 5 yardas de Devonta Freeman.
Los Patriotas no aprendieron y otra vez regalaron un balón y siete puntos. Alford demostró que las horas de ver videos del rival, conocer sus tendencias y leer muy bien las formaciones del rival se traducen en adelantarse a lo que va a suceder. El defensivo se adelantó al receptor y llegó antes que él al pase de Tom Brady. Lo tomó y 82 yardas después lo transformó en anotación.
Esos dos errores de Nueva Inglaterra transformaron todo, y más porque en medio de esas dos acciones, los Halcones anotaron con una ofensiva que en 1:49 recorrió 62 yardas.
Velocidad pura con la que los Halcones se fueron al descanso 21-3. Todo estaba de su lado. Todo.
Y toda la presión era para Brady y compañía.
Atlanta no había sido precisamente una fortaleza a la defensiva en la segunda mitad de los encuentros en la temporada, al haber permitido 13 puntos en promedio. Ganaban por 18 pero caerse de esa forma sería dejarle a Brady la opción de remontar. Tenían que mantener el script de la primera parte del juego para no meterse en problemas.
Y sí lo mantuvieron. Su ofensiva volvió a montar un sólido ataque que en 4:14 recorrió 85 yardas y a la mitad del tercer cuarto ya ganaban 28-3.
Patriotas como pudo, rascando en todo lo que quedaba en el tanque, sumó nueve puntos en dos series ofensivas consecutivas. El problema es que invirtieron mucho para poder sumar esas unidades: 25 jugadas en las que recorrieron 147 yardas en 11:28 minutos.
El reloj se volvió un enemigo. Pero su defensiva se volvió su mejor aliado.
Primero recuperó un balón en el campo rival. ¿Cómo? Llegándole al QB rival. Dont’a Hightower le pegó a Matt Ryan y el balón quedó libre. Patriotas lo recuperó en la yarda 25. Brady no desperdició ese regalo y cinco jugadas después, llegó el pase a Danny Amendola y la espectacular conversión puso el juego con solo ocho puntos de diferencia y 5:56 en el reloj.
Atlanta se mató solo cuando un castigo de sujetando los sacó de la zona de gol de campo y en lugar de posiblemente ponerse arriba 31-20, tuvieron que despejar. Brady lo volvió a hacer y en 2:33 movió a su ofensiva 91 yardas y anotó. Tenían que hacer la conversión. Y la consiguieron. 28-28. Tiempo extra.
Agencias