Orbe

Todo mundo escamado con la izquierda salvaje

16/11/2018 – Desde que Carlos Salinas de Gortari arribó a la Presidencia de la República en diciembre de 1988, acusado (por aquella casi heroica izquierda) de haberle robado a Cuauhtémoc Cárdenas la silla del águila, hasta este 1 de diciembre que Enrique Peña Nieto dejará el poder, transcurrirán 30 años del llamado neoliberalismo salvaje.
¡Cómo se va el tiempo! Y por montones pasan los años en un instante, salvo para el más grande icono del tango, Carlos Gardel que decía que 20 años no eran nada.
Excelente dosis de ánimo y optimismo del legendario “zorzal criollo”. Indiscutiblemente este no tuvo la presión devastadora que genera en 130 millones de mexicanos la tradición de violencia e impunidad.
Trágicamente el vastísimo futuro que tenía el país por delante, se lo acabaron (con un placer patológico) los mafiosos que tomaron muy en serio la versión de que la nación era de su absoluta propiedad.
No es coincidencia, en ese sentido, que psicólogos y psiquiatras, tengan sus consultorios a reventar. Y que la ola de suicidios se incremente a niveles alarmantes.
Pero ahora los vendepatrias parecen cambiar no sólo de camiseta, sino hasta de piel. Y resulta que todo mundo anda escamado con la amenaza de que Andrés Manuel López Obrador inaugure una era donde la izquierda, salvaje para no variar, domine y arrase con lo poco que queda de México.
Las cosas se suscitan, además de las broncas entre tribus y mafias integradas al gabinete de AMLO (y los protagonismos y desplantes de poder de quienes, diciéndose morenistas, no se andan con cuentos para pasarle la factura al nuevo presidente), por los llamados “machetazos” que al propio tabasqueño ya se le hicieron costumbre asestar a cuanto proyecto, reforma e inversión se le atraviese en su camino.
Gravísimo es, entre paréntesis, que nadie de su equipo más cercano, le haga ver (en “buena onda”) que no sólo está metiendo la pata, sino las dos y hasta el cuerpecito arriba de la cintura, llegando a veces al pecho.
Al rato, los estilos ominosos del pasado volverán, y a la pregunta del inquilino de Palacio Nacional de “¿qué hora es?”, los bufones dirán: “¡la que usted diga, señor presidente!”.
Una de las pocas reculadas, sin embargo, ya vino a través de Alfonso Durazo, próximo secretario de Seguridad Pública, admitiendo ayer por la mañana, en un noticiero de televisión, que definitivamente el mando en ese importantísimo sector lo tendrán los gobernadores de los estados.
Y naturalmente es así. Aunque recuérdese que ya muchos palabreros cizañosos daban por hecho que los llamados delegados federales casi serían elevados al rango de “gobernadores de facto”, sólo porque le reportarán “directamente” al presidente.
Reporte que en la realidad no será como se anuncia, y la razón es que el presidente electo apenas tendrá tiempo de acordar con sus colaboradores más cercanos.

FGCV SE REÚNE CON SENADORES Y DIPUTADOS
Aquí en Tamaulipas el Gobernador Francisco García Cabeza de Vaca es una de las pocas figuras de la política que no ha detenido su periplo público para escuchar esas sandeces.
Concentrado en múltiples proyectos, antier se reunió en la Ciudad de México con los congresistas federales de Tamaulipas, a fin de que los proyectos prioritarios del Gobierno del Estado sean considerados e impulsados por los legisladores en el próximo Presupuesto de Egresos de la Federación.
Destacó el mandatario que los programas y obras de su administración se encuentran regidos por el Plan Estatal de Desarrollo, el cual se conforma por 3 ejes rectores:
Seguridad Ciudadana, Bienestar Social y Desarrollo Económico Sustentable.
A los senadores y diputados federales les explicó la importancia de trabajar de manera alineada a los proyectos de Tamaulipas, y de esa forma “cumplir con el compromiso que tenemos con las familias de nuestro Estado, con su seguridad, su bienestar y el desarrollo económico que recupere la grandeza de Tamaulipas”.

APRENDER DEL PASADO: UAT
Al organizar la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) el Primer Congreso de Investigación Histórica del Noreste, denominado “Dr. Álvaro Matute Aguirre”, en homenaje póstumo al reconocido historiador mexicano, el secretario de Investigación y Posgrado, Julio Martínez Burnes, destacó en su mensaje que la investigación no es solo documentar y dar evidencias de lo sucedido, sino también debe servir para aprender del pasado y dejar constancia de ello a las nuevas generaciones.
¡Feliz fin de semana!