10/03/15 .-Toda la grasa es mala así que hay que eliminarla de nuestra dieta. Falso. No toda la grasa es mala, también nos puede ayudar a sentirnos saciados después de comer, lo que evita el deseo de comer un segundo plato o postre. Nuestro cuerpo necesita grasa para funcionar de forma correcta y no se debe satanizar su consumo, sólo se debe vigilar su ingesta.
-Si has comido demasiado, sáltate la cena. Falso. Si lo que quieres es bajar de peso, bajo ninguna circunstancia te saltes una comida porque después tendrás más hambre. Esto aumentará las posibilidades de atacar el refrigerador y consumir un mayor número de calorías. Si te has saciado durante la comida, lo mejor es hacer un poco de ejercicio y cenar ligero, por ejemplo, puedes prepararte un refrigerio con dos rebanadas de pan, pechuga de pavo y queso bajo en grasas.
-Elimina los carbohidratos de tu dieta. Falso. A pesar de la enorme popularidad de las dietas que excluyen los carbohidratos, representan uno de los elementos que más necesita tu cuerpo. Se les conoce como el combustible del cuerpo, por lo que si los eliminas, no podrás tener una buena salud. Recurre a los granos enteros, que son muy saludables y beneficiosos para tu día a día.
-Bebe agua antes de comer. Verdadero. Esta recomendación es muy útil, ya que te ayudará a comer menos cantidad de alimentos. Según un ensayo clínico presentado durante el congreso anual de la Sociedad Química Americana de Boston, los adultos que bebían dos vasos de agua antes de cada comida perdieron más peso que aquellos que no lo hicieron.
-Come muy despacio. Verdadero. La sensación de saciedad comienza 15 o 20 minutos después de haber iniciado la comida. Disfruta de cada bocado despacio y saborea. Existe un lapso entre que la boca disfruta el alimento y el cerebro siente plenitud en el estómago.