ElBravo_Notas_728x90_1
La suerte de los miles de migrantes que están en Matamoros no cambia, este año se verán obligados a quedarse, algunos aunque quieran regresar a sus países de origen no pueden al no tener dinero, la organización internacional que los ayudaba en este rubro no puede ahora.
Gladys Cañas, presidenta de la asociación civil Ayudándoles a Triunfar, informa que ya muchos se desesperaron y “prevalece un estrés colectivo”. Algunos quieren regresar ya al ver que no tienen futuro hacia Estados Unidos porque el gobierno cerró la frontera hace más de seis meses y no hay audiencias ni oficinas que atienden los casos allá.
“No tienen dinero para regresar a sus países de origen tampoco, otros se han deprimido al ver la situación y ya no es posible permanecer aquí”, dice.
Trabajo
En realidad son pocos los que han logrado hacer vida aquí y encontraron trabajo, siendo ya autosuficientes. “Hemos colocado en un trabajo a 300 más o menos y otros más tienen a sus hijos en la escuela, están rentando y llevan una vida normal se puede decir”, refiere.
Así que para quienes se decidieron permanecer en la ciudad las cosas han mejorado pero otra parte no quiere o no deciden qué hacer con su vida.
“Encontramos de todo como siempre, muchos se resisten y tienen la esperanza de ser escuchados el próximo año en su petición de asilo. Citas en febrero o marzo para ver su caso y si logran cruzar hacia aquel país de manera legal”, manifiesta.
Apoyos
Aunque quisieran ayudar en estos momentos las asociaciones civiles no siempre se puede, el mundo está detenido por la pandemia de coronavirus y no se sabe cuándo acabará esto. Incluso las organizaciones internacionales que daban respaldo para regresar al país de origen ya no están ofreciendo eso por lo pronto.
“Así que estamos en espera mientras las cosas logran controlarse un poco, para todos es complicado y peor para ellos al no tener un lugar digno donde pasar sus días”, indica. Viene ya otra vez la temporada invernal donde no se sabe cómo será y van a batallar demasiado para permanecer en los campamentos.
Condiciones
Muchos han empezado a rehacer su vida en Matamoros al buscar trabajo, escuela y casa para su familia, ya no dependen de nadie para vivir, es una actitud muy positiva de querer hacer las cosas y sobrevivir donde sea.
A lo mejor ya no tiene caso aferrarse al llamado «sueño americano» dado que las cosas no marchan bien y en los próximos meses no se sabe, por más que se quiera ver el futuro con optimismo no siempre es posible, de acuerdo a los hechos anteriores se puede tener una idea de lo que ocurrirá.
Así que no es fácil para estas personas su condición en estos momentos de pandemia, su futuro es más incierto que nunca.
