Gaceta

Inflación que se siente y se recrudece

En plenas vacaciones de verano y en la antesala del inicio de las clases presenciales el mes que viene, agosto, se ve y se siente, la inflación está presente, ya que más allá de la información sobre los porcentajes de aumento en los precios de productos y servicios en el país, la gente se da cuenta que acudir a las tiendas para comprar aquello que requieren los hogares para funcionar, es más caro.
El asunto es que, la inflación acumulada durante este 2022, llega ya al 8.16 por ciento, aunque sólo se haya movido en la última quincena 0.17 puntos, pero, al paso que va, de acuerdo con los analistas, la inflación podría llegar al fin de año hasta casi el 10 por ciento, así que, las condición económicas de las familias y por tanto del pueblo, están a punto de colapsar.
Además, es innecesario tratar de encontrar explicaciones a esto de la inflación, porque seguro con la intervención del Gobierno Federal, resultará que tal fenómeno económico que medra la seguridad financiera de los hogares no existe y está solo en la mente de unos cuántos, aunque, a la hora de la realidad para la compra de productos y el pago de servicios resulta que, padres o madres que llevan la administración de los hogares, se dan cuenta de que cada quincena que pasa tienen que dejar de comprar varias cosas porque de otra manera no alcanzará.
Los alimentos que más subieron en la primera quincena de julio fueron el huevo, cebolla, naranjas, tubérculos como la papa y esta quincena que viene el golpe más duro se sentirá con el aumento al precio de las tortillas que, según versiones salidas desde los directivos de la industria de la masa y la tortilla podría llegar a los 30 pesos por kilogramo.
En todos los productos alimenticios que subieron el porcentaje superó a los seis puntos, aunque hubo cientos que rondaron entre un tres y cinco por ciento.
Respecto a servicios en la primera quincena de julio denota el hecho de que aumentaran en más de un seis por ciento los pasajes de avión, que ocurren en los días en que la mayor parte de los ciudadanos viaja a destinos turísticos tras hacer un alto en su actividad laboral y porque la mente y el cuerpo de las personas requiere de una pausa que permita echarle más ganas para alcanzar las metas que fueron previstas para el año.
Cosas que no se entienden nada bien, pero que son congruentes con el bolsillo de los ciudadanos, es el llamado índice de precios subyacente avanzó 0.34 por ciento en la última quincena para un acumulado anual del 7.56 por ciento, en tanto que, el no subyacente se incrementó en 0.68 por ciento, para un acumulado anual de casi el 10 por ciento, así que, hablar de inflación es una realidad que preocupa y que se siente aún sin números, dado que el salario se deteriora y cada día alcanza para menos bienes de consumos o de servicio.
Desde luego, esto es en julio, pero, agosto será estresante al interior de los hogares, porque las clases presenciales en todos los niveles educativos implicarán muchos gastos a los cuales no podrá hacerse frente por el deterioro salarial que se arrastra desde hace muchos tiempo, es decir, este sexenio y anteriores.
Los útiles escolares, uniformes, pasajes, colegiaturas, costo de inscripciones, aportaciones para mejoramiento urgente de las escuelas y dinero para el gasto diario de los estudiantes, serán el reto a vencer por cada pareja de padres de familias.

Los otros
La huelga que iniciaron los casi 40 mil trabajadores de Teléfonos de México para demandar mejoras al salario, pensiones y que se cubran las plazas vacantes, no duró ni las 24 horas, apenas comenzaron las actividades en las instancias gubernamentales y la Secretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde Luján, apareció en senda foto con los directivos de la empresa y los dirigentes del sindicato, para dar por concluido el conflicto.
En menos de 20 días deberán firmarse los resultados de una mesa técnica de diálogo, en la cual la Secretaría del Trabajo llevará la voz cantante para acordar el asunto de los pasivos salariales, las pensiones y el resto de los puntos que fueron demandados por los trabajadores quienes, hace más de 35 años no realizaban un movimiento huelguístico, de esos que sí hubo muchos cuando TELMEX era una empresa del Gobierno de la República.
En la ciudad de Reynosa, las cosas siguen complicadas, porque el alcalde Carlos Peña Ortiz no quiere que lo pesque la Fiscalía General del Estado en el ejercicio de sus funciones y cuyo tiempo de ausencia permite a los adversarios del regeneracionista avanzar en sus planes de acorralarle y hacer que deje la presidencia municipal para que uno de los suyos se haga cargo y de esa forma, la alcaldía sea conquistada por los panistas.
Peña Ortiz, es de los que piensan que debe aguantar, sin embargo, ya no es desde dentro del círculo de sus adversarios declarados, sino de otros vecinos, que se llevan a cabo acciones con ese propósito, en virtud de que el hijo del titular de la Auditoría Superior del Estado, Jorge Espino Ascanio, de nombre Luis Espino Acosta quien andaba en el Partido Movimiento Ciudadano, se prestó para tender un cuatro a los Regidores del Ayuntamiento de Reynosa con la finalidad de, dinero de por medio, algo así como cinco millones de pesos para quien jalara con él a fin de desconocer al alcalde.
Bonito circo político, padre funcionario en el PAN, hijo en las filas del Partido Movimiento Ciudadano, pero metido en negocios con el partido que emplea a su padre, para sacar de la jugada a los regeneracionistas que les ganaron la presidencia municipal en las urnas.
Frente a ello, cabe la prudencia del despilfarrador de Espino Ascanio, quien se deslindó de los asuntos políticos y económicos de su hijo, aunque eso de nada sirve ya que, familia es familia, aunque sí fue válida la negativa de que el Partido Movimiento Ciudadano está fuera de la jugada de Espino Acosta y según dijo el Coordinador del MC, Juan Carlos Zertuche Romero, sobrino del Diputado local plurinominal regeneracionista de Reynosa Armando Zertuche Zuani, ellos no tienen nada que ver con el hijo del Auditor.