Familia de mexicoamericano asesinado por policía de Chicago exige justicia

Los padres de Anthony Álvarez, originarios de Durango y de Guerrero, un mexicoamericano que murió en Chicago tras un incidente con el oficial Evan Solano, aseguran que el policía lo asesinó y exigen justicia.

“Queremos justicia para mi hijo. Queremos que el policía que le disparó (vaya a la) cárcel (…) ese policía no debería estar en las calles haciendo lo que está haciendo, ya debería estar en la cárcel”, dijo Oscar Martínez, padre de Anthony.

La madrugada del pasado 31 de marzo, el joven de 22 años perdió la vida luego de que Evan Solano le disparó en las inmediaciones de Eddy Street y Laramie Avenue, en la comunidad de Portage Park.

La madre de Anthony señaló que el joven salió esa noche a cenar con su hermano, pero ya nunca regresó. Durante la madrugada, la señora originaria de Durango supo que se había registrado un tiroteo donde había muerto un joven. Se acercó para investigar si era su hijo, pero luego de dos horas, nadie le dio información.

De acuerdo con el médico forense del condado de Cook, el joven murió de múltiples heridas de bala. Y se presentaron algunas irregularidades en su atención médica, como que se le aplicó un torniquete, para evitar que muriera desangrado, en la pierna equivocada.

En una entrevista, luego de manifestarse frente a la estación de policía el sábado pasado, su padre detalló que a dos meses de este incidente la familia no ha recibido una respuesta clara de parte de las autoridades respecto a los hechos ocurridos con el fallecimiento de su hijo.

“Hasta ahora no nos han dicho nada (…), todas las negligencias que hicieron en el transcurso cuando lo balearon. Le hicieron el torniquete en la pierna equivocada, dieron la dirección de la ambulancia mal y si él tenía más oportunidades para vivir, ahí mismo lo mataron”, dijo la madre de Anthony, Verónica Álvarez.
De acuerdo con el Instituto Invisible, dedicado a velar por la disciplina de los policías en Estados Unidos, el caso de Anthony no es el primero donde Evan Solano se ve involucrado, pues tiene nueve reportes por uso indebido de la fuerza.

​El caso más reciente ocurrió el pasado 21 de mayo, semanas después de la muerte de Anthony, cuando el policía sacó su arma en un accidente vehicular en Logan Square Park.

“Tenemos muchas comunidades latinas en Chicago (…) a Evan Soano lo queremos ver en la cárcel. Esta es la primera vez que estamos frente a la policía pero hace dos meses que la familia está juntando evidencia, tratando, con el abogado (…) estamos en la calle demandando justicia porque están ignorando (el caso) y haciendo como que no pasa nada”, explicó por su parte. Ana Burgos, miembro del Party for Socialism and Liberation, que ha acompañado la protesta de la familia de Anthony.
Desde 2014 más de 2 mil 600 latinos fueron asesinados por policías en Estados Unidos o murieron mientras estaban en custodia policíaca, señala el informe Raza Database Project, hecho por la organización UnidosUs.

Solamente en Chicago, donde perdió la vida Anthony, entre 2010 y 2015, se registraron 435 tiroteos policiales, en los cuales los oficiales mataron a 92 personas e hirieron a otras 170, de acuerdo con una investigación hecha por el Chicago Tribune.

“Queremos que los demás se enteren, no nada más hispanos; que vean este caso, que cierren los ojos por unos segundo y se pongan en el lugar de uno (…) no queremos policía como él, queremos alguien que nos proteja no que nos mate”, finalizó el padre que nació en Guerrero, pero emigró a Estados Unidos en busca de una mejor vida.
Al cumplirse dos meses de su muerte el lunes pasado, la familia y algunos amigos de Anthony montaron un pequeño homenaje en la calle, con flores y fotografías sobre la banqueta, pero un oficial de policía se acercó para pedirles que “limpiaran” y se fueran, como se observa en un video.

Agencias