Ex agente de la DEA critica deportación de implicado en caso de Enrique Camarena

El ex agente de la Administración para el Control de Drogas, (DEA por sus siglas en inglés), Héctor Berrellez, se dijo molesto tras la deportación de José Bernabé Ramírez, al que calificó como un asesino sanguinario, luego de pasar 30 años en prisión por su participación en el secuestro, tortura y asesinato del agente especial, Enrique Kiki Camarena, en 1985.

En entrevista con Víctor Martínez para MILENIO Televisión, el ex agente norteamericano calificó a Bernabé Ramírez como un sujeto que le gustaba torturar bajo las órdenes del cártel de Guadalajara en la década de los 80, al señalar que no solamente estuvo involucrado en la muerte del agente de la DEA, sino en la de otras seis personas de origen norteamericano.

“José Bernabé Ramírez no nomás estuvo involucrado en la muerte de Enrique Camarena, él también participó y estuvo involucrado en los cuatro testigos de Jehová que fueron asesinados por el cártel de Guadalajara en 1984, y también participó en la muerte de dos americanos que fueron asesinados en La Langosta, restaurante de Rafael Caro Quintero”, sostuvo.

Detalló que para detener a José Bernabé Ramírez tuvo que hacerse pasar por un narcotraficante que supuestamente lo contrataría para asesinar a un agente federal en Los Ángeles,

“Durante el tiempo que yo estuve tomando tequilas con él en un bar, aquí en Los Ángeles, él me admitió que había participado en la muerte de Enrique Camarena, que él lo había torturado, que él lo había secuestrando y que había estado interrogándolo. Él pensaba que yo era un matón, que yo lo estaba contratando para que matara a una gente aquí en Los Ángeles, fue cuando él me comentó y fue grabada esa llamada, esa mención que él hizo”, dijo.

Además, señaló que él mismo fue quien arrestó a Bernabé Ramírez y que, posteriormente, el agente Malone del FBI, “dijo que eran iguales a los que se había recogido en el sitio del crimen donde Camarena había sido interrogado”.

Héctor Berrellez se dijo molesto con la Procuraduría americana y la DEA por la deportación de José Bernabé, al puntualizar que arriesgó su vida para obtener el testimonio en el que éste admitió participar en el secuestro, tortura y asesinato de Enrique Camarena, al mencionar que se burló al momento de decírselo.

“Personalmente estoy muy molesto porque arriesgue mi vida infiltrando a este asesino, tener un asesino enfrente de mí, sabiendo que era un matón, arriesgué mi vida para lograr, no que confesara, porque no sabía que estaba confesando, que me dijera de que él se estaba burlando de cómo torturó a Camarena, se estaba riendo de cómo lo habían pateado, cómo lo habían golpeado”, enfatizó.

Ayer, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas, (ICE por sus siglas en inglés), informó que Bernabé Ramírez fue devuelto a México el miércoles de esta misma semana en la frontera de Ciudad Juárez, Chihuahua.

José Bernabé es uno de los pocos implicados que fueron condenados por la justicia estadunidense en el caso Camarena que, de acuerdo con los expedientes en poder de Washington, Estados Unidos, tiene como principal protagonista al narcotraficante Rafael Caro Quintero, quien actualmente permanece prófugo.

Agencias