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Un año después de que la pandemia de COVID-19 cobró millones de muertes a nivel mundial, científicos descubrieron que el virus SARS-CoV 2 se transmite principalmente a través del aire y en muy pocos casos se adquiere de las superficies.
Importantes agencias de salud pública aún insisten en que las superficies deben desinfectarse constantemente porque representan una amenaza de contagio, incluso la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó en su guía más reciente -actualizada en octubre- evitar tocar las superficies, en especial las de espacios públicos.
“Evite tocar superficies, especialmente en entornos públicos, porque alguien con COVID-19 podría haberlas tocado antes. Limpiar las superficies con regularidad con desinfectantes estándar “, señaló la OMS.
Se cree que las superficies contaminadas, conocidas como fómites, son un medio de transmisión del virus, debido a que su ARN ha sido identificado “en las cercanías de personas infectadas con el SARS-CoV-2”.
COVID-19 se transmite a través del aire
Emmanuel Goldman, microbiólogo de la Facultad de Medicina de Rutgers New Jersey en Newark y uno de los representantes de la OMS, informó a Nature que, al realizar un estudio, detectó que las superficies presentaban relativamente poco riesgo de transmitir el virus.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos llegaron a la misma conclusión y en su sitio web señalaron que la transmisión superficial “no se cree que sea una forma común de propagación del COVID-19“, sin embargo, siguen recomendando que “la desinfección frecuente de superficies y objetos tocados por varias personas son importantes”.
Goldman señaló que el nuevo coronavirus se transmite predominantemente a través del aire, por personas que hablan y exhalan gotas grandes, así como pequeñas partículas llamadas aerosoles.
Por lo anterior, gobiernos, empresas y las personas deben dejar de invertir grandes cantidades de tiempo y dinero en esfuerzos de limpieza profunda, y destinar una parte a la ventilación o instalación de purificadores de aire rigurosamente probados. También se debe recordar a las personas que deben usar cubrebocas y mantener la sana distancia.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos llegaron a la misma conclusión y en su sitio web señalaron que la transmisión superficial “no se cree que sea una forma común de propagación del COVID-19“, sin embargo, siguen recomendando que “la desinfección frecuente de superficies y objetos tocados por varias personas son importantes”.
Goldman señaló que el nuevo coronavirus se transmite predominantemente a través del aire, por personas que hablan y exhalan gotas grandes, así como pequeñas partículas llamadas aerosoles.
Por lo anterior, gobiernos, empresas y las personas deben dejar de invertir grandes cantidades de tiempo y dinero en esfuerzos de limpieza profunda, y destinar una parte a la ventilación o instalación de purificadores de aire rigurosamente probados. También se debe recordar a las personas que deben usar cubrebocas y mantener la sana distancia.
Agencias
