Estallan disturbios en Irak; manifestantes toman edificios de gobierno

Al menos 11 personas murieron y 160 han resultado heridas, después de la decisión del poderoso clérigo musulmán chiíta iraquí Moqtada al Sadr de abandonar la política por el estancamiento político provocó enfrentamientos entre sus partidarios y rivales respaldados por Irán.

La mayoría de los fallecidos serían manifestantes afines a Al Sadr, según la agencia de noticias oficial, que confirmó embestidas policiales en la Zona Verde de Bagdad, donde se encuentran las principales instituciones.

Los jóvenes leales a Sadr asaltaron la sede del Gobierno en la zona verde de la capital iraquí, que había sido el palacio del dictador Saddam Hussein, y tomaron las calles del entorno donde se enfrentaron a partidarios de grupos respaldados por Teherán.

Se escucharon disparos en la capital y se vio a algunas personas apuntando armas a partidarios de Sadr, según testigos, mientras otros apuntaban al aire en una nación repleta de armas tras años de conflictos y disturbios.

Los enfrentamientos ocurrieron horas después del anuncio, lo que provocó que sus partidarios, que llevaban semanas realizando una manifestación en el parlamento en la Zona Verde, se manifestaran y asaltaran la principal sede del gabinete. Algunos se metieron a la piscina del palacio, gritando y ondeando banderas.

Las fuerzas de seguridad han utilizado gases lacrimógenos y también fuego real para contener a los manifestantes, antes de que los líderes políticos apelasen a la contención de todas las partes. Entre las instituciones asaltadas está el edificio que alberga la oficina del primer ministro.

El Ejército iraquí declaró toque de queda a partir de las 1230 GMT e instó a los manifestantes a abandonar la Zona Verde.

Sadr criticó a otros líderes políticos chiíes por no prestar atención a sus peticiones de reforma. No dio detalles sobre el cierre de sus oficinas, pero dijo que algunas de sus instituciones culturales y religiosas permanecerían abiertas.

Sadr retiró a sus legisladores del Parlamento en junio después que no logró formar un Gobierno. El estancamiento político entre él y sus rivales chiíes cercanos a Irán ha hecho que Irak lleve tiempo sin un Gobierno.

Agencias