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Diversos estados, como Texas y Florida, volvieron a adoptar medidas de confinamiento mientras aumenta el número de infecciones confirmadas de coronavirus en Estados Unidos, que esta semana alcanzaba los 40 mil casos en un día y reavivara los temores de una segunda ola de coronavirus.
Además, muchos condados rurales en California, Arkansas, Missouri, Kansas, han visto sus casos confirmados duplicarse en una semana, del 19 de junio al viernes, de acuerdo con datos recopilados por la Universidad Johns Hopkins.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, ordenó el cierre de todos los bares, mientras que Florida prohibió el consumo de alcohol en dichos establecimientos. Ambos estados se sumaron a una pequeña pero creciente lista de entidades que han suspendido una mayor reapertura de sus economías debido a rebrotes, principalmente en el sur y el oeste del país.
Abbott había emprendido una de las calendarizaciones más dinámicas de reapertura en el país. El republicano se había resistido a las exigencias de que ordenara el uso de cubrebocas y también se había rehusado hasta la semana pasada a permitir que los gobiernos locales impusieran esa medida
“Es evidente que el aumento de los casos es impulsado principalmente por cierto tipo de actividades, como la asistencia de texanos en los bares”, declaró Abbott.
En Florida, por instrucción del gobernador republicano Ron DeSantis, la agencia que regula los bares en el estado adoptó medidas después de que el número diario de nuevos casos confirmados se acercara a los 9 mil, casi el doble del récord de hace apenas dos días.
Varios de los estados más afectados, como Arizona y Arkansas, tienen gobernadores republicanos que se han resistido a decretar como obligatorio el uso de cubrebocas y han reiterado el deseo del presidente Donald Trump de reabrir la economía rápidamente pese a las advertencias de que podría haber nuevos brotes de coronavirus.
Luisiana reportó su segundo día con más de mil 300 casos confirmados, una cifra que hizo que el gobernador demócrata John Bel Edwards suspendiera un mayor levantamiento de las restricciones a la movilidad. El gobernador republicano de Arizona, Doug Ducey, hizo lo mismo, ya que los casos nuevos en su estado superan los 3 mil al día y un 85 por ciento de las camas de hospital están ocupadas.
Por segunda vez en una semana, Tennessee reportó su mayor incremento diario en infecciones confirmadas, con más de mil 400, pero el gobernador republicano Bill Lee ha sido reacio a reimponer restricciones o a exigir el uso de mascarillas.
Los expertos en salud han dicho que se está registrando un preocupantemente elevado número de infecciones entre personas jóvenes que están saliendo otra vez, a menudo sin cubrebocas y sin acatar otras medidas de distanciamiento social.
Si bien el incremento refleja una mayor cantidad de pruebas, los expertos dijeron que hay mucha evidencia que demuestra que la epidemia está regresando, incluido un aumento en el número de muertes y de hospitalizaciones en algunas partes del país y un mayor porcentaje de pruebas que arrojan resultados positivos.
El resurgimiento del virus en Estados Unidos ha llamado la atención de otros países. Parece casi seguro que la Unión Europea prohibirá que los estadounidenses ingresen al bloque en el corto plazo, esto en momentos en los que el eurogrupo elabora nuevas directrices de viaje, confirmaron el sábado diplomáticos del bloque.
Agencias
