El exmagistrado del Poder Judicial de Nayarit y exsubfiscal estatal, Rodrigo Benítez Pérez, fue detenido en Estados Unidos por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés). El exfuncionario se encuentra bajo custodia en el Centro de Detención Contractual Elizabeth, ubicado en la ciudad de Elizabeth, Nueva Jersey.
De acuerdo con información oficial del ICE, la detención de Benítez Pérez obedece a causas migratorias, aunque no se ha informado la fecha exacta del arresto ni los motivos específicos del proceso. Este centro de detención alberga a personas sujetas a revisión o deportación conforme a la ley migratoria estadounidense, según Aristegui Noticias.
En México, Rodrigo Benítez Pérez enfrenta graves acusaciones penales. En noviembre de 2024, el Congreso de Nayarit le retiró el fuero constitucional y su cargo como magistrado numerario para permitir que la Fiscalía General de la República (FGR) continuara con las investigaciones en su contra.
La FGR lo señala por presunta obstaculización de investigaciones relacionadas con desapariciones forzadas, particularmente en el caso de 39 personas desaparecidas desde 2017, así como por la destrucción de prendas y otras evidencias vinculadas a esas víctimas.
Además, el exmagistrado enfrenta una denuncia por violación equiparada, presuntamente cometida en 2018 contra una trabajadora bajo su cargo, y por tráfico de influencias durante su gestión como Director General de Investigación Ministerial entre 2017 y 2023 en la Fiscalía General del Estado de Nayarit.
Tras perder el fuero, Benítez Pérez fue declarado prófugo de la justicia mexicana. Sin embargo, desde su página de Facebook realizó diversas publicaciones en las que señalaba presuntos actos de corrupción dentro del gobierno de Nayarit, incluyendo supuestas redes de huachicoleo y tráfico de influencias, en las que habría implicado a funcionarios estatales y al propio gobernador.
Su arresto en territorio estadounidense podría abrir la puerta a un proceso de extradición a México, dependiendo de la naturaleza de los delitos que enfrenta y del curso de su procedimiento migratorio. Hasta ahora, ni las autoridades mexicanas ni estadounidenses han emitido una postura oficial sobre una posible repatriación.
Agencias