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Debido a que durante las últimas semanas se han recibido varios casos de probable abuso de autoridad por parte de oficiales de Tránsito, la Contraloría se ha enfocado no sólo en indagar cada asunto, sino que se organiza una reunión con directivos del departamento, para que se eviten esas situaciones.
Las quejas
Según Iván Puente, edil comisionado en Seguridad Pública, se trata de casos donde presuntamente el servidor público coacciona al ciudadano que detiene por alguna infracción, para que le dé una cantidad de dinero en efectivo a cambio de “no levantar el vehículo con la grúa”.
Son personas que han venido a denunciar el hecho porque hay hartazgo social, al automovilista le da coraje que a pesar de las dificultades por las que atraviesa con motivo de la pandemia, el desempleo, el cierre de negocios, se vea obligado a dar el poco dinero que traiga a un elemento de seguridad.
Bien cotizados
El problema es que no se trata de un simple “apoyo”, sino que los señores patrulleros piden de 500 a mil pesos por evitar el procedimiento, ya sea justificado o no.
Ya que la mayoría de las multas no rebasan los 300 pesos, Puente invita al ciudadano que en caso de incurrir en una falta y ser detenido por oficiales de vialidad, que mejor les pide la boleta, ya que además, si la cubre en menos de cuatro días, se le otorga un 50 por ciento de descuento.
Explica que el agente vial no puede proceder a recoger el vehículo si puede garantizar el pago de la infracción con su licencia en regla, tarjeta de circulación, o algún documento del vehículo, ese es un derecho.
Por supuesto, esto no aplica cuando el chofer anda borracho, puede incluso ser privado de su libertad mientras “se le pasa”.
Reunión
Durante la tarde se reunirían con directivos de Tránsito para determinar qué hacer con esta situación, ya que son situaciones reincidentes.
Los agentes que han sido detectados en una actuación arbitraria, definitivamente han sido dados de baja.
