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Familias damnificadas por inundaciones provocadas por lluvias y el desfogue de la presa Peñitas iniciaron protestas frente a la delegación local de la secretaria de Bienestar en Villahermosa, Tabasco, para pedir que se les incluya en el censo de afectaciones.
La inconformidad surge un día después que oficialmente concluyera el levantamiento de las afectaciones por los Servidores de la Nación. Los damnificados llegaron desde el municipio de Nacajuca y colonias de Centro, donde afirman que aún hay poblaciones anegadas.
“La estufa y los otros muebles que estaban ahí, todo lo quemamos. Ni aún así llegaron, no nos hicieron caso (los Servidores de la Nación) y exigimos que vayan a las colonias y sectores que les hicieron falta y nos den el apoyo”, manifestó José Elvira, habitante de la colonia Sabina que perdió sus enseres domésticos y su vivienda todavía se haya inundada por las aguas estancadas del río Mezcalapa.
Con pancartas en mano, fotografías y videos, los manifestantes exhibieron los daños de sus viviendas inundadas, como el caso de Olga López, de la colonia Casa Blanca, donde el agua rebasó el metro de altura durante la segunda inundación.
“Yo perdí todo, todo se perdió porque aquí nos fuimos a más de un metro de agua, pero en mi caso fue a más de metro y medio, y lo peor de todo es que nos dijeron que nos iban a censar a la 6 de la tarde y ahí estuvimos como mensos. El presidente (Andrés Manuel López Obrador) y el gobernador (Adán Augusto López Hernández), dijeron que nadie iba a quedar sin censar y ahorita están faltando a su palabra”, externó molesta Olga López.
De acuerdo con la Secretaría de Bienestar, eran más de mil 396 comunidades de Tabasco las que serían censadas, mientras que el número de beneficiarios de los apoyos consistentes en vales para reposición de enseres domésticos y para el mantenimiento menor a la vivienda, superaba las cien mil familias.
Más tarde, los damnificados fueron atendidos en el velódromo de la Deportiva en Villahermosa. Sin guardar la sana distancia, los afectados fueron convocados y formados para ser atendidos en una cancha de básquetbol donde entregan su documentación para acceder al censo y recibir un vale. El lugar es vigilado por elementos de la Policía Estatal y sólo permiten el acceso a 10 personas en determinado tiempo.
Agencias
