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El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) celebrará una reunión pública virtual sobre el conflicto palestino-israelí el domingo, informaron diplomáticos el jueves.
La reunión, originalmente programada para el viernes, fue solicitada por Túnez, Noruega y China. En tanto, Estados Unidos, que había bloqueado la sesión del viernes y consideraba una reunión a principios de la próxima semana, acordó trasladarla al domingo, dijeron las mismas fuentes.
A la par, varios líderes mundiales han condenado la violencia e instaron a la moderación y una visita de funcionarios de seguridad egipcios fue un desarrollo significativo en las gestiones internacionales para lograr un cese del fuego. Dichas labores diplomáticas han sido cruciales para poner fin a rondas anteriores de enfrentamientos.
Los funcionarios se reunieron primero con los dirigentes de Hamás en la Franja de Gaza, para después reunirse con los israelíes en Tel Aviv, dijeron dos funcionarios de inteligencia egipcios que hablaron bajo condición de anonimato debido a que no estaban autorizados para discutir las reuniones con los medios de comunicación.
Hamas lanzó una gran cantidad de misiles hacia Israel el jueves, mientras que los israelíes azotaron la Franja de Gaza con más ataques aéreos y artillería, además de que convocaron a 9 mil reservistas más que podrían ser utilizados para emprender una operación por tierra.
Las hostilidades se intensificaron a pesar de las gestiones de mediadores egipcios que sostuvieron reuniones en persona con ambas partes.
En otra posible escalada, por lo menos tres misiles fueron disparados desde el sur de Líbano hacia Israel, un ataque que amenazaba con abrir un nuevo frente en el combate.
Los disparos de artillería y con tanques empezaron a caer en la Franja de Gaza el jueves por la tarde, provocando que varias familias huyeran de sus hogares, dijeron testigos palestinos. El uso de artillería en el cuarto día de la ofensiva de Israel aumentó la probabilidad de víctimas civiles.
Los combates anteriores entre Israel y el grupo islamista Hamas, incluida una devastadora guerra en 2014, habían estado limitados en gran medida al empobrecido y bloqueado territorio palestino de la Franja de Gaza y a las comunidades israelíes fronterizas. Pero esta ronda parece extenderse a sitios más lejanos y de manera más amplia que en cualquier otro momento desde la intifada (alzamiento) palestina del 2000.
Algunos ataques con proyectiles han alcanzado el área metropolitana de Tel Aviv, donde árabes y judías han salido a las calles, golpeado salvajemente a personas y prendido fuego a automóviles. Se han cancelado o desviado los vuelos en el principal aeropuerto de la ciudad.
En tanto, los palestinos conmemoraron de manera sobria el término del mes sagrado musulmán del ramadán, mientras los milicianos lanzaban una andanada de proyectiles tras otra e Israel llevaba a cabo oleadas de bombardeos. Desde que empezaron los choques el lunes, Israel ha derrumbado tres edificios de gran altura que, señaló, albergaban instalaciones de Hamás.
El Ministerio de Salud de la Franja de Gaza informó que la cifra de muertes ha aumentado a 103 palestinos, incluidos 27 niños y 11 mujeres, mientras que 530 personas han resultado heridas. La Yihad Islámica confirmó los decesos de siete milicianos, mientras que Hamás ha reconocido 13 fallecimientos de sus miembros, incluido un comandante de alto rango. Israel dijo que el número de combatientes palestinos que han perdido la vida es mucho mayor.
Siete personas han fallecido en Israel. Entre ellas estaba un soldado que murió en un ataque con un misil antitanque y un niño de 6 años que fue impactado en un ataque con misiles.
Agencias
