ElBravo_Notas_728x90_1
Es por demás que los concesionarios del transporte urbano ya no pueden soportar los altos costos de operación que tienen. En especial el combustible que sube de precio a cada rato y las refacciones también, precios que el gobierno jamás controla ni lo hará, asegura Gilberto Tapia.
El secretario general del Futaammyc, el sindicato más grande del transporte en la ciudad, acepta que para muchos ya no es negocio y se han retirado o ajustado las rutas con el fin se lograr sobrevivir a esta severa crisis económica.
Para nadie se puede decir que la situación es buena porque en dos años no hubo rentabilidad ya que movilizaron pocos pasajeros.
RECORTAN
Algunas rutas ya no volvieron a ser iguales desde el 2019 cuando empezaron hacer los recortes, luego de ahí vino la pandemia y es fecha que no se recuperan del todo. Tampoco el gobiernos les autoriza un aumento a las tarifas desde hace cinco años, todo ese tiempo los costos de operación sí han aumentado de manera significativa pero eso no lo quieren entender las autoridades.
Ni siquiera han llevado a cabo el estudio de factibilidad para ver si es urgente ya, al menos eso deben hacer cada año para conocer la realidad que pasan, manifiesta.
JUSTIFICAN
Por esas razones menos se puede hablar de una modernidad en este sector, donde se supone que los camiones no tienen que rebasar los diez años de antigüedad. Pero la verdad es otra cosa y muchas de las unidades ya contaminan pero no pueden hacer nada al respecto.
“Por más que lo intentemos no es rentable para muchos, no alcanzamos para una inversión en camiones nuevos ni tampoco tenemos acceso a créditos por parte del gobierno”, acepta.
