ElBravo_Notas_728x90_1
Las autoridades federales se comprometieron con el gobierno municipal a realizar una inspección a fondo en el caso de la distribución de gas natural en Matamoros, tras denuncia de una probable gran negligencia al operar con instalaciones en mal estado, que han provocado más de 200 fugas por toda la ciudad, una que ha causado dos decesos.
Tras el incidente ocurrido en la Presidencia Municipal por el reporte de una probable fuga de gas en el área de Secretaría de Salud, derivado más que nada del nerviosismo de las personas ante los recientes acontecimientos causados por fallas en la red de suministro, la regidora Alma Rosa Gazcón informa que ya hay una respuesta de la Secretaría de Energía, que se ha comprometido a revisar la situación.
Inspección
Que en los próximos días una comisión de especialistas en el manejo de este combustible van a revisar las instalaciones de la compañía para evaluar las condiciones en que se encuentran y determinar si es seguro que pueda seguir operando, y en su caso, aplicar las medidas correctivas que desde el punto de vista técnico sean necesarias.
Obviamente por todo lo acontecido la empresa amerita no sólo fuertes sanciones por operar con una red en malas condiciones, sino porque además se ha negado a responder por daño moral, para las familias de las víctimas fallecidas, daños y perjuicios para los propietarios de la tienda donde fue la explosión, y una casa contigua.
Error funesto
Otra de las irregularidades que se plantearán a los investigadores de la Comisión Reguladora de Energía, es que en sus protocolos de seguridad, la empresa Engie se niega a atender reportes de fuga de gas por ejemplo, si quien avisa no es cliente.
Precisamente, de acuerdo a información recabada, esto fue uno de los factores por los que la concesionaria del gas natural se negó a atender el reporte que se le hizo de la tienda de conveniencia desde un día antes a la explosión.
Y en medio de toda esta situación, se siguen presentando llamados de alerta de la población a Protección Civil y Bomberos, ante la detección de cualquier olor “sospechoso”, ya que hay zozobra entre la comunidad por lo que está sucediendo, como fue el caso del edificio del Ayuntamiento, donde se trataba de emanaciones del drenaje sanitario.
También se han detectado otras llamadas que son de broma, de personas que no toman en cuenta que las instituciones de emergencia operan con recursos limitados y los distraen con avisos falsos, lo que puede dejarlas sin la oportunidad de atender enseguida una emergencia real.
