Nueva York.- Moisés Chacón es el número 14 mil 861, el número de Jon Cordero es el 15 mil y la banda que usa en la muñeca Oumar Camara dice que es el número 16 mil 700.
Estos hombres son migrantes que se han manifestado en contra del límite de 30 días que estableció la Ciudad de Nueva York para los adultos solteros para su estadía en cualquier albergue para personas que no tienen hogar.
Después de 30 días, cualquiera que desee quedarse en el albergue tiene que volver a solicitar un espacio.
Aunque no hay suficientes camas en estos días, cada persona tiene que tomar un número en una oficina del ayuntamiento situada en East Village en Manhattan, y esperar.
Hasta este martes, varios migrantes dijeron que el ayuntamiento había contactado a personas que tenían los números 14 mil.
A los demás, la ciudad les ofreció sólo un lugar en el suelo o en una silla en uno de los centros de espera que se encuentran esparcidos en los cinco distritos.
La Ciudad de Nueva York tiene un “derecho único al albergue” que proporciona una cama para cada persona sin hogar que la solicite.
Sin embargo, en las últimas semanas, debido al creciente número de migrantes, esa garantía es algo que existe sólo en papel.
La Sociedad de Ayuda Legal, que monitorea que el ayuntamiento acate el mandato del derecho al albergue, dijo este lunes que el ayuntamiento le informó que cualquier noche, de 800 a mil migrantes se han quedado en la lista de espera y que la espera promedio para conseguir una cama es de más de ocho días.
Funcionarios del ayuntamiento rechazaron confirmar o contradecir las cifras citadas por Ayuda Legal.
Aún antes de que la lista de espera para migrantes entrara en vigor, más personas aparecían durmiendo en las calles o en los trenes subterráneos.
El número de personas que la lista de personas sin hogar en la ciudad aumentó hasta en un 30 por ciento el pasado mes de septiembre, comparado con septiembre del 2022.
Del martes por la noche al miércoles por la mañana, el ayuntamiento realizó su conteo anual exigido por el gobierno federal de personas que duermen en las calles y trenes subterráneos.
La estimación del pasado mes de enero fue de más de 4 mil personas --- el mayor número en casi 20 años.
El conteo de este año es probable que incluya algunos de los migrantes que están esperando que la ciudad les proporcione una cama.
Debido al invierno --- la semana pasada fue la más fría en la ciudad en casi cinco años --- la vida para muchos de los casi 70 mil migrantes sin hogar se ha convertido progresivamente en más desolador.
Agencias
