Procesan niños con videoconferencias

Corpus Christi, Tx.- Los siete niños estaban parados uno al lado del otro en una instalación del servicio de inmigración de Texas. La imagen fue transmitida a Atlanta, a 1,600 kilómetros donde un juez sentado en un juzgado casi vacío trataba de resolver un problema con el audio.

El lunes, el primer día en que entró en vigor el cambio, la jueza Sirce Owen tomó en Atlanta los casos de decenas de menores mediante videos. Entre ellos el de un niño de siete años que no tenía abogado, el de una adolescente que trataba de calmar a su hija y el de un grupo de niños que lucían todos sweaters verdes.

En el juzgado de Atlanta, en medio de los problemas con el audio, la jueza procesó a los siete chicos de una instalación de Corpus Christi, Texas. Les explicó por qué estaban allí y cuáles eran sus derechos.

Los problemas con el audio empeoraron, pero Owen terminó de interrogar a los menores y les dio hasta el 20 de abril para que encuentren un abogado.

Mientras Owen esperaba que llegase el siguiente grupo de menores al salón de Corpus Christi, en los parlantes se escuchó la voz de una mujer que decía «… y me apuntaron con un arma…» antes de que el sonido volviese a interrumpirse.

Uno por uno, llamó a aproximadamente una docena de menores de una instalación donde se les daba sweaters verdes con cierre. Los chicos se sentaron en una mesa junto a un abogado de las Caridades Católicas.

Una pantalla plana a la izquierda de la mesa mostraba el rostro de la jueza Owen. Pero los niños tenían la mirada fija en la intérprete de español.

Un chico de siete años llamado Justin pareció confundido cuando la jueza le preguntó si entendía lo que significaba tener derecho a un abogado. Owen volvió a explicarle en tono pausado y el muchacho le dijo que sí, que quería más tiempo para encontrar uno.

Owen vio a más de 40 niños el lunes. Reprogramó algunas audiencias para darle a los menores la oportunidad de encontrar abogados o para que los abogados puedan preparar mejor sus presentaciones. Concedió un puñado de solicitudes de repatriación voluntaria. Y transfirió algunos casos de muchachos que ya habían cumplido 18 años al programarse la próxima vista.

El gobierno de Donald Trump expandió esta semana el uso de vistas a través de comunicaciones con videos para los niños migrantes y decenas de muchachos retenidos en Houston, que son escuchados por un juez en Atlanta.

Houston tiene uno de los tribunales de inmigración más activos del país, con cientos de casos evaluados semanalmente y menores que con frecuencia se presentan en persona ante un juez.

«Están apurando los procesos de los chicos», sostuvo Zenobia Lai, vicepresidenta de los servicios legales de inmigración de la rama de Caridades Cristianas. «Si estuviesen presentes en las vistas, los jueces podrían analizar el lenguaje corporal», dijo Lai. «Con esto, no sé si los jueces los miran siquiera. No sé lo que ella ve».

Hubo 25,351 vistas llevadas a cabo mediante videoconferencia en los primeros 17 días de enero, aproximadamente una cuarta parte de las 95.492 que hubo en todo el 2019, de acuerdo con cifras del gobierno obtenidas por el abogado de inmigración Andrew Free.

La mayoría de los menores a cargo del gobierno cruzaron la frontera desde México solos. Algunos de los que están en instalaciones de la ORR fueron enviados por sus padres, que están en campamentos del lado mexicano de la frontera, en tanto que otros pueden haber sido separados de sus padres o del adulto con quien estaban por sospechas de fraude o negligencia.

«Están apurando los procesos de los chicos», sostuvo Zenobia Lai, vicepresidenta de los servicios legales de inmigración de la rama de Houston de Caridades Cristianas.

«Si estuviesen presentes en las vistas, los jueces podrían analizar el lenguaje corporal», dijo Lai. «Con esto, no sé si los jueces los miran siquiera. No sé lo que ella ve».

Agencias