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La ejecución de Alon Azulay y Benjamin Yeshurun Sutchi está relacionada con la mafia israelí y la delincuencia organizada internacional, de acuerdo con la investigación de la Procuraduría de Ciudad de México.
Autoridades dijeron que tratan de confirmar la hipótesis de que el crimen pudo haber sido ordenado desde Israel, por una organización conocida como Los Mosley que contactó sicarios mexicanos para cometer el doble crimen.
Según reportes, los israelíes, quienes fueron asesinados a tiros por una mujer disfrazada y un acompañante en Plaza Artz, están relacionados con el tráfico de drogas y secuestros, particularmente a miembros de la comunidad judía.
Se trata de líneas de investigación que forman parte de la carpeta que inició la procuraduría capitalina, cuyos detectives han cruzado datos con la inteligencia de Israel para corroborarlas.
En tanto que por la “magnitud” del caso, es probable que la Fiscalía General de la República (FGR) también intervenga en la indagatoria, ya que hay delincuencia organizada y se utilizaron armas de fuego reservadas para el Ejército, Marina y Fuerza Aérea, señalaron funcionarios.
La procuraduría investiga por qué Yeshurun Sutchi estaba en México pese a sus antecedentes penales y nexos con el cártel de los Beltrán Leyva, pues en 2005 fue capturado en Polanco por la entonces Secretaría de Seguridad Pública del DF y posteriormente deportado a Israel.
Ayer, Ulises Lara, vocero de la PGJ, confirmó que el doble homicidio fue una acción directa, por lo que quedó descartada la versión del crimen pasional que dio la mujer detenida por este crimen, quien dijo llamarse Esperanza y tener 33 años.
“Nos lleva a relacionar los hechos con arreglos entre grupos criminales, por lo tanto puede tratarse de arreglos con la mafia israelí, por lo que se lleva a cabo la identificación plena de Alon Azulay y Yeshurun Sutchi, y de sus antecedentes penales.
“Fue una acción directa; sí fueron (los involucrados) para cometer un homicidio, no hubo otra razón; ahora tenemos que generar los vínculos, si además las personas asesinadas tenían antecedentes, entonces se va completando un cuadro mucho más complejo”.
El portavoz comentó que la mujer detenida, quien se disfrazó con peluca y otra vestimenta, dio una primera versión de los hechos: venganza por infidelidad. Sin embargo, posteriormente aportó “otra narrativa”.
Respecto al estatus legal de los dos israelíes, así como su probable participación con bandas de la delincuencia organizada, nacionales y extranjeras, sostuvo que es materia de análisis de la carpeta de investigación.
Asimismo, añadió que la procuraduría trabaja en coordinación con autoridades federales a fin de esclarecer ilícitos.
Agencias
