A partir de este año, grupos religiosos harán su primer declaración anual

10/02/2016 – Más de 4 mil asociaciones religiosas tendrán que entregar su contabilidad electrónica al Servicio de Administración Tributaria, además de presentar su facturas digitales, esto como parte de las políticas de fiscalización que empezarán este año al sector religioso. Lo cual representa para algunas agrupaciones un riesgo y que amena con hacerlas desaparecer en el corto plazo.
Para Marco Antonio Ruiz Domínguez, director del área de asuntos religiosos, esta medida de la autoridad hacendaría pone en riesgo la existencia de distintos grupos religiosos, sobre todo los pequeños o de nueva creación, y principalmente los que no se encuentran registrados en la Secretaría de Gobernación, y que están inconsideradas como “sectas”.
Asegura que el ordenamiento que pretende hacer la Secretaría de Hacienda y Crédito Público sobre el manejo del capital económico de las religiones, podría paralizar la actividad de algunos templos y sectores religiosos, ya que ante la falta de conocimiento sobre este nuevo esquema, muchos grupos ya amenazan con disolverse o fusionarse con otros grupos que están debidamente registrados.
Asegura que ya tienen un promedio de más de 200 solicitudes por parte de grupos religiosos en Matamoros, quienes están solicitando intervenga esta unidad para que se gestionen con el SAT asesorías, talleres o cursos para que se les capacite en el proceso que implica dicha medida, ya que aseguran no quieren ser sancionados.

Temen ser multados
Y es que la autoridad hacendaría reveló que serán tratados como cualquier otro contribuyente que tiene obligaciones pero también derechos y que paga a esta autoridad hacendaría, lo que implica multas, requerimientos y todo tipo de sanción de la que son objeto cualquier otro ciudadano que está en el padrón hacendario.
Sobre ello dice Marco Antonio Ruiz, “tengo entendido que a partir de este año harán los grupos religiosos su primer declaración anual, lo que implica un importante proceso de incorporación, y es ante esta premura por la que se han manifestado los dirigentes de las iglesias en Matamoros, sobre cómo serán los criterios con los que declaren su movimiento de ingresos y egresos, como también si se deben expedir comprantes de pago y bajo qué concepto”, comenta.
Asegura que la principal inquietud es sobre las donaciones de su fieles, entre las que se encuentran los diezmos y las limosnas, por lo que señala el representante de las iglesias que este concepto es el que más confusión ha generado, y del que teme se convierta en el principal punto para radicalizar a estas agrupaciones.

Aprietan políticas fiscales.
Para Isidro Vargas, miembro del Colegio de Contadores Públicos en Matamoros, esta política fiscal para las iglesias que se anunció a principios del 2015, es parte de las políticas de fiscalización que el Gobierno Federal se ha visto en la necesidad de aplicar para una mayor capacitación de impuestos, por lo que asegura que solo se tratan de medidas recaudatorias que se endurecen.
Asegura que esto es como una señal de la mala situación en la que se encuentra la economía nacional, ya que argumenta que la autoridad se ha visto a recurrir a otros rubros que anteriormente no les representaban un ingreso y que ahora por muy pequeño que sea, se suma a alista de mucho que ahora son obligados.

Mario Alberto Hernández