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Víctimas de violencia y desplazados de comunidades afectadas por el crimen organizado mantienen su plantón afuera de la Secretaría de Gobernación desde hace 40 días en espera de que sean atendidos por el subsecretario Alejandro Encinas.
Este lunes uno de los manifestantes, Omar Bello Pineda, periodista desplazado de Guerrero, extrajo sangre de su cuerpo y manchó sus manos para marcar uno de los muros de la dependencia sobre la calle de Abraham González.
«Como una forma de protesta ante la negativa de darnos solución de nuestras peticiones hoy sigo desangrándome y estaré aquí hasta que salgan y nos atiendan aunque me quede sin sangre”, señaló.
El reportero de Zihuatanejo, quien desde 2017 permanece en la Ciudad de México debido a amenazas del crimen organizado en Guerrero, demandó apoyo por parte del Mecanismo de Protección para Defensores de Derechos Humanos y Periodistas.
Las víctimas de violencia piden les informen cómo van a funcionar los apoyos ahora que se extinguieron los fideicomisos y que se garantice el acceso a los recursos para los familiares de las víctimas por parte de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas.
En el plantón afuera de la SEGOB continúan, además, padres de los menores fallecidos en la Guardería ABC de Hermosillo, Sonora y defensores de derechos humanos.
Agencias
