‘Me mataron en vida’. Mamá de niño mexicano que murió en tiroteo de secundaria de Georgia
El pasado jueves el Gobierno de México, por medio de su Consulado en Atlanta, confirmó que Christian Angulo, un menor de apenas 14 años entre las víctimas mortales del tiroteo perpetrado en una escuela secundaria de Georgia que terminó con la vida de cuatro personas.
Emma Angulo, es madre de Christian, uno de los estudiantes que fue asesinado en el tiroteo en la escuela Apalachee High School, en una entrevista con Univision Noticias, Emma recordó con lágrimas el último momento que compartió con su hijo.
"Me mataron en vida a mí y a mi familia", relató con un nudo en la garganta, mientras su voz reflejaba la desolación de haber perdido a su hijo en circunstancias tan violentas e incomprensibles.
“Nos dio un abrazo a mí y a su papá la noche anterior antes de irse a su cama; siempre lo voy a traer en mi corazón”, añadió. Ese gesto, tan cotidiano y a la vez tan especial, se ha convertido en el recuerdo más preciado de una familia que jamás imaginó enfrentar un dolor tan grande.
Christian, un joven lleno de sueños y expectativas, cursaba apenas su primer año de preparatoria. Como muchos otros adolescentes de su edad, tenía todo un futuro por delante, un futuro que le fue arrebatado de forma abrupta. Según Emma, su hijo no tuvo la oportunidad de decidir lo que quería para su vida. "No le dieron tiempo de saber qué es lo que él quería. Apenas tenía 14 años, le robaron toda su vida, sus planes y el estar con nosotros", expresó con dolor.
En búsqueda de una vida mejor
Hace una década, la familia Angulo decidió mudarse de California a Georgia con la esperanza de encontrar una vida más tranquila, lejos de la violencia que se había vuelto una constante en su antigua comunidad. Querían ofrecerle a Christian y a sus otros hijos la oportunidad de crecer en un entorno más seguro, con mejores oportunidades académicas.
"Buscábamos una buena escuela para nuestros hijos, un lugar donde pudieran estudiar y ser felices", comentó Emma. Pero ese sueño de seguridad se convirtió en una pesadilla el día que otro adolescente de 14 años decidió abrir fuego contra alumnos y maestros en la escuela de Christian.
La madre de Christian clama por justicia, "no es justo que más familias pasen por esto. No es justo que nuestros hijos vayan a la escuela con miedo", dijo Emma con firmeza.
Un adiós que no debió ser
"Me mataron en vida", repite Emma. Hoy, la familia Angulo se enfrenta a la desgarradora tarea de despedirse de Christian, un joven que soñaba con el futuro pero al que no le dieron la oportunidad de construirlo. La pérdida de Christian ha dejado un vacío imposible de llenar, pero su memoria vivirá en el corazón de quienes lo conocieron y amaron.
Mientras tanto, su madre, Emma, continúa pidiendo respuestas, justicia y un cambio profundo que evite que otras familias sufran lo que ellos están sufriendo hoy.
Agencias