Iglesia en Texas, envuelta en un mega escándalo de abuso sexual que sacude a Estados Unidos
El verano comenzó con una sacudida para Gateway Church, una de las megaiglesias más prominentes de Estados Unidos. Las acusaciones de abuso sexual infantil, reveladas en un blog dedicado a historias de sobrevivientes cristianos, han puesto en el centro del torbellino a Robert Morris, el fundador y hasta hace poco líder de la congregación ubicada en Southlake, Texas.
Desde la revelación del escándalo en junio, la iglesia ha enfrentado una serie de desafíos, desde la renuncia de Morris hasta la reciente salida de un pastor clave y la cancelación de eventos importantes.
Con una disminución significativa en la asistencia y una serie de cambios en la estructura eclesiástica, la comunidad de Gateway Church se encuentra en una encrucijada dolorosa, lidiando con el impacto de las acusaciones y buscando sanar en medio del tumulto.
El origen del escándalo: acusaciones de abuso y la respuesta de Gateway Church
La crisis en Gateway Church comenzó a tomar forma en junio, cuando Cindy Clemishire, de 54 años, reveló en el blog The Wartburg Watch que había sido víctima de abuso sexual por parte de Robert Morris en 1982, cuando ella tenía solo 12 años. Clemishire narró que el abuso comenzó el día de Navidad de ese año y se extendió hasta que confesó a sus padres en 1987.
Poco después de la publicación de estas acusaciones, Morris admitió haber tenido "un comportamiento sexual inapropiado con una joven" en la década de 1980. En un primer comunicado, Gateway Church explicó que el pastor había enfrentado un "fracaso moral" durante su juventud y había pasado por un "proceso de restauración" de dos años en una iglesia anterior. Sin embargo, la magnitud del abuso y la edad de la víctima no se revelaron inicialmente.
La renuncia de Morris, que ocurrió días después de que salieran a la luz las acusaciones, dejó a la congregación en estado de shock. La Junta de Ancianos de la iglesia, al anunciar la dimisión, admitió que no conocían todos los detalles del caso y que la revelación de que el abuso había sido contra una menor fue completamente nueva para ellos. La conmoción fue evidente en los miembros de la iglesia, como lo expresó Tra Willbanks, uno de los ancianos, quien se mostró visiblemente afectado y ofreció disculpas públicas a Clemishire.
En respuesta a la crisis, Gateway Church ha contratado un bufete de abogados para revisar el informe de abuso y esclarecer los hechos. Clemishire ha instado a otras posibles víctimas a que se pronuncien, asegurando que recibirán apoyo y no tendrán que enfrentar el proceso en soledad.
Un futuro incierto: los desafíos y cambios para Gateway Church
La crisis en Gateway Church ha provocado una serie de cambios significativos que han dejado a la congregación en una situación incierta. Desde la renuncia de Robert Morris, varios líderes clave de la iglesia han abandonado sus cargos, lo que ha intensificado la incertidumbre sobre el futuro de esta megaiglesia.
Entre los eventos más destacados:
-Renuncia de James y Bridgette Morris: El hijo de Robert Morris y su esposa, que estaban previstos para asumir roles de liderazgo en el futuro, decidieron dejar la iglesia para permitir un "nuevo comienzo". Durante su despedida, James Morris enfocó su mensaje en la esperanza y la comunidad, mientras que su esposa expresó su tristeza y lamento.
-Despidos y licencias: Tres ancianos que sirvieron en la junta directiva de Gateway Church entre 2005 y 2007 fueron puestos en licencia mientras se lleva a cabo la revisión del bufete de abogados. Además, el pastor Kemtal Glasgow fue despedido por un "problema moral" no especificado, aunque la iglesia aclaró que su situación no está relacionada con el caso de Robert Morris.
-Cambio de nombre en Houston: La congregación en Houston, dirigida por Ethan Fisher, yerno de Robert Morris, ha decidido cambiar su nombre a Newlands Church. Aunque el cambio simboliza una separación, Fisher ha enfatizado que la iglesia sigue siendo autónoma tanto financiera como legalmente.
-Reacción de la congregación: La comunidad de Gateway Church está dividida sobre su futuro. Algunos miembros, como Lou Comunale, sienten que la iglesia ha manejado la crisis con transparencia y buscan seguir adelante. Sin embargo, otros, como Emily High, han decidido dejar la iglesia, sintiéndose traicionados por los eventos recientes.
A medida que Gateway Church navega por esta difícil temporada, los pastores interinos, como Max Lucado y Joakim Lundqvist, continúan apoyando a la congregación y fomentando la esperanza en un futuro más prometedor. La búsqueda de un nuevo pastor y la restauración de la confianza en la iglesia serán cruciales para superar esta crisis y avanzar hacia una nueva etapa.
Agencias