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El 2 de octubre del 2019, fiscales norteamericanos ingresaron una acusación de reemplazo en contra de Vicente Carrillo Fuentes, en la cual se incluyen siete cargos como empresa criminal continua, conspiración para distribuir, importar y distribuir cocaína, uso de armas de fuego y lavado de dinero.
Entre el equipo de fiscales a cargo se halla Michel Robotti, y la acusación aun fue firmada por el entonces fiscal general del este de Nueva York, Richard Donahue, meses antes de que fuera llamado a Washington por el presidente Donald Trump, para que lo auxiliara en su campaña. Robotti y Donahue fueron parte del combo que envió al Joaquín Guzmán Loera a la cadena perpetua.
Carrillo Fuentes había sido acusado en esta misma corte desde el 2009 pero en el nuevo procedimiento ingresado hace apenas dos años, se borró cualquier referencia al Cártel del Norte del Valle colombiano, que fundó Orlando Henao, el cual para las agencias de seguridad estadunidenses ha quedado completamente desarticulado.
Así es que, ante la imposibilidad de traer testigos de dicha organización, en el presunto caso de que El Viceroy fuera extraditado, el dictamen del 2019 borró cualquier referencia a ese cartel aunque agregó los dos cargos finales, el de uso de armas y lavado.
El hermano de “El Señor de los Cielos” fue sentenciado en México a 28 años de cárcel, de los cuáles ya cumplió siete luego de que su detención ese cumpliera en octubre del 2014. Lo que se ignora es si el gobierno mexicano lo enviará a Estados Unidos luego que, desde agosto del 2015, un juez en Texas solicitó al gobierno mexicano su extradición. En México, aunque otro juez ordenó iniciar dicho procedimiento, un último magistrado frenó la orden por lo que la posibilidad de que El Viceroy enfrente a la justicia en Norteamérica —que ofreció 5 millones de dólares por su captura—, sigue en duda.
“Aplaudo al Gobierno de México y a la Fiscalía de los Estados Unidos para el Distrito Este de Nueva York por hacer cumplir la ley en asociación mutua en esta investigación de tráfico de drogas”, dijo el agente especial de la DEA, Ray Donovan en octubre del 2019.
Sin embargo, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador se ha mostrado cauteloso con la idea de enviar a mexicanos a enfrentar a la justicia estadunidense. Incluso el año pasado, el presidente se refirió en varias Mañaneras a la posibilidad de pedir a Estados Unidos la extradición de Genaro García Luna, ex secretario de Seguridad Pública durante el gobierno de Felipe Calderón detenido en Nueva York acusado de narcotráfico, petición que se formaliizó en diciembre del 2020 por la Embajada de México en Washington sin que se sepan los avances de la misma.
Agencias
