Esta temporada así como es de mayor consumo por las fiestas que conlleva diciembre, también es motivo para que muchos proveedores aumenten sin razón los precios. Servicios y artículos de primera necesidad son modificados sabiendo que la gente como quiera los va a comprar.
El economista Pablo Reyna acepta que es una práctica común pero lo más lamentable es que no hay a dónde recurrir en tales circunstancias. En pocas palabras el consumidor está indefenso y nadie le pone un alto a los precios.
Son prácticas “lesivas para la economía” aprovechando el momento y no se puede hacer nada.
Buscar
Aquí la única recomendación es buscar en varios negocios el precio más accesible para cada producto y comprar a tiempo. Es decir antes de la fecha importante para no andar haciendo compras de último momento.
El 24 y el 31 de este mes son las dos celebraciones de mayor relevancia y se utilizan muchos ingredientes para las cenas que se organizan en familia. Por eso la recomendación es comprar antes y se podrá encontrar más barato tal vez.
Medios
Otra manera es buscando ayuda a través de la Profeco pero en medios digitales o por teléfono porque aquí no hay representación.
Cada consumidor va a decidir qué hacer o dónde comprar dependiendo de su capacidad, pero es injusto que las autoridades no puedan sancionar a nadie que fomenta estas prácticas desleales que van en contra de la economía de mucha gente.
Sobre todo de los más vulnerables o aquellos que están desempleados y no les alcanza para comer lo básico.