Trump dará «crédito» a México para el muro.

23/10/16.- El aspirante republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, aseguró ayer que el muro que construirá en la frontera con México si será pagado por Washington, pero tendrá que ser “reembolsado” por las autoridades mexicanas, y que suspenderá la inmigración “desde regiones propensas al terrorismo”.

En un discurso, en el que planteó cómo serían sus primeros 100 días de presidencia, en la ciudad de Gettysburg (Pensilvania), Trump afirmó que su “ley para poner fin a la inmigración ilegal” aportaría los fondos para financiar el muro “con el completo entendimiento”, enfatizó, de que México “reembolsará” a Estados Unidos

Hasta ayer, el candidato republicano había recalcado que sería el gobierno de México directamente quien se haría cargo de la factura por la construcción del muro, destinado a frenar el flujo migratorio.

También Trump volvió a subrayar su polémica idea de prohibir “la inmigración desde regiones propensas al terrorismo”, aunque eludió ofrecer detalles de cómo aplicará esta propuesta.

El lugar escogido por Trump, Gettysburg, es simbólico en EU ya que fue donde el presidente Abraham Lincoln pronunció en 1863 uno de sus discursos más reconocidos en plena Guerra Civil.

Ubicado en los sondeos por detrás de su rival demócrata, Hillary Clinton, para las elecciones estadunidenses del próximo 8 de noviembre, Trump intentó retomar la ofensiva revelando las medidas que llevará a cabo en sus primero 100 días de gobierno.

En ese contexto, prometió crear “al menos 25 millones de empleos en una década”, imponer límites a los tiempos legislativos, renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (Tlcan) y salir del Tratado Transpacífico.

También prometió revocar la reforma de la salud promulgada por el presidente saliente, el demócrata Barack Obama, y dijo que cancelará “miles de millones de dólares en pagos a los programas de la ONU para el cambio climático”, al tiempo que retomará los programas de desarrollo
de energías fósiles.

Prevé, por otra parte, destinar un billón de dólares a inversiones en infraestructura en los próximos diez años, bajar los impuestos a la clase media en 35% y reducir las tarifas universitarias. Entretanto Clinton, a quien los sondeos le otorgan una clara ventaja a nivel nacional, se presentó anoche en el mismo estado de Pensilvania, pero en Pittsburgh. “A diferencia de nuestro rival, nosotros no pensamos que podamos ganar solos. Yo quiero ser también su presidenta”, dijo en alusión a los republicanos.

“Está pasando algo verdaderamente fantástico en estos momentos. La gente se está juntando (demócratas, republicanos, independientes…) para rechazar el odio y las divisiones”, afirmó. Y agregó, bajo los aplausos de la concurrencia: “la ira no es un proyecto”.

A dos y semanas y media de la elección, los indicadores son favorables a la ex secretaria de Estado, que el miércoles cumple 69 años

Agencias