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Las comisiones unidas del Senado aprobaron los dictámenes de las leyes secundarias de la Guardia Nacional y pasarán al pleno para su discusión y aprobación.
De acuerdo con los dictámenes aprobados, la Guardia Nacional será un cuerpo civil que se coordinará con las fuerzas armadas y los gobiernos locales para realizar operativos; tendrá despliegue en todo el territorio nacional, podrá realizar operaciones encubiertas y con usuarios simulados para desarrollar operaciones de inteligencia, entre otras atribuciones.
La Ley Orgánica de la Guardia Nacional faculta al Presidente para asignar a los miembros provenientes de las Fuerzas Armadas, quienes después de vencer el plazo máximo de militares en la corporación podrán ser reasignados por el mismo jefe del Ejecutivo al Ejército y la Marina a sus unidades.
Para asegurar su carácter civil, las leyes secundarias establecen que los integrantes de ésta deberán “estar funcionalmente separado de su institución armada de origen y quedar adscrito a la Guardia Nacional, sujeto a la disciplina, fuero civil y cadena de mando establecidos en esta Ley”.
El personal de la Guardia Nacional será evaluado anualmente en el desempeño de su función, de conformidad con la normativa aplicable y deberán acreditar controles de confianza a través de un certificado.
La Ley Orgánica obliga a la coordinación con los estados y municipios, pero la federación cargará con el costo de los despliegues, salvo en caso de que haya convenios con las entidades.
La Secretaría de Hacienda tendrá que disponer de los recursos suficientes para su implementación.
Los elementos de la Guardia Nacional que se involucren con la delincuencia organizada recibirán hasta 60 años de prisión, con 20 años de agravante.
El mando de la Guardia Nacional queda a cargo del secretario de Seguridad Pública y tendrá un comandante responsable de los despliegues y habrá un órgano de coordinación interinstitucional con el Ejército y la Secretaría de Marina.
El comandante podrá “ordenar operaciones encubiertas y de usuarios simulados para desarrollar operaciones de inteligencia para la prevención de los delitos”.
La Guardia Nacional será competente para conocer de delitos federales y podrá conocer delitos del fuero común, previo convenio con las autoridades de las entidades federativas o municipales.
Para garantizar el mando civil, la Guardia Nacional tendrá una coordinación en la administración pública general con representantes de las secretarías de Seguridad y Protección Ciudadana, de Defensa Nacional y de Marina.
“Es interés de quienes suscribimos la presente iniciativa reiterar que en las funciones de mando y dirección de la Guardia Nacional la responsabilidad corresponde de forma exclusiva a la autoridad civil, por lo que la instancia de coordinación operativa interinstitucional estará ubicada administrativamente fuera de la Guardia Nacional y tendrá como objetivo coadyuvar en la coordinación y colaboración estratégica entre las dependencias de la administración pública federal”.
La Guardia Nacional será una policía civil de élite, que además goce, en lo inmediato y hacia el futuro, de la confianza ciudadana a través de los resultados que en la materia obtenga para el beneficio social de nuestro país.
Para operar, la Guardia Nacional contará con divisiones especiales y entre ellas una en materia turística.
Los miembros de la Guardia Nacional podrán recibir instrucción militar y portar las insignias que tenían en las Fuerzas Armadas,
El personal de la Guardia Nacional será evaluado anualmente en el desempeño de su función, de conformidad con la normativa aplicable, y su profesionalización se realizará a través de instituciones de formación policial públicas, nacionales o extranjeras, e instituciones de Educación Militar y Naval.
Por la mañana, el presidente de la Junta de Coordinación Política, Ricardo Monreal, aseguró que lograron acuerdo entre los líderes de los distintos grupos parlamentarios y que hicieron modificaciones a 250 artículos.
Monreal aseguró que las leyes secundarias respetan las fuerzas armadas, pero al mismo tiempo erradican el uso de fuerza letal contra las manifestaciones.
El Senado cierra hoy su periodo extraordinario y los legisladores lograron acuerdos para aprobar el dictamen, en lo general y en lo particular, en una sola votación.
Agencias
