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8/03/2017 – El Colegio de la Frontera Norte (Colef) reunió por primera vez a las autoridades e instituciones de la sociedad civil de la región limítrofe de Tamaulipas y Texas, para reflexionar sobre la migración humana, con miras a crear un protocolo binacional de respuesta ante una posible ola de deportaciones masivas.
El coordinador de la mesa de trabajo, Oscar Misael Hernández, afirmó que uno de los problemas identificados en torno a la migración es que existe una serie de instituciones y asociaciones, que en muchos casos no se conocen y/o no se sabe exactamente qué hacen ni trabajan de manera articulada.
“La mesa tiene dos objetivos muy claros: el primero es que instituciones gubernamentales y las asociaciones civiles y religiosas nos digan qué están haciendo en materia de migración irregular, y en materia de deportaciones en ambos lados de la frontera. El segundo objetivo es que ellos se conozcan entre sí y empiecen a establecer vínculos para trabajar de manera conjunta”, precisó.
Primera fase
En la reunión participaron representantes de la Secretaría de Bienestar Social, del Departamento de Protección del Consulado de México en Brownsville, del Consulado de Estados Unidos en Matamoros, del Instituto Nacional de Migración, del Instituto Tamaulipeco para los Migrantes, del Grupo Beta y del Centro de Atención al Menor Fronterizo.
Asimismo asistieron los responsables de casas del migrante de ambos países, como son la Casa San Juan Diego, el albergue para deportados e indigentes Senda de Vida, del Centro Ozanam, Good Neighbor Settlement House, Loaves and Fishes of the Rio Grande Valley y de la organización La Unión del Pueblo Entero (LUPE).
“Estamos intentando esto como una primera fase de crear una agenda de trabajo y posteriormente haríamos como institución centrada en la investigación social un tipo de evaluación. El Colef tiene una tradición en estudios migratorios y en hacer bastantes sugerencias en materia de política migratoria, aunque desafortunadamente no somos los tomadores de decisiones, pero ellos sí lo son”, indicó.
Menos migrantes
Entre los datos que refirieron los participantes, la expectativa de que aumentaran las deportaciones con la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos no se han cumplido. De hecho, el cruce de migrantes hacia la Unión Americana también se ha inhibido, lo que se observa en el número de personas a las que atienden las casas de migrantes en el Valle de Texas.
Víctor Maldonado, director del Ozanam Center, que da refugio a inmigrantes y personas sin hogar en Brownsville, Texas, confirmó que dicho albergue ha recibido a cerca de un 50 por ciento menos inmigrantes de los que llegaban hasta el año 2015.
“Anteriormente nosotros veíamos una capacidad de 97 hasta 120 personas por mes, ahorita estamos viendo de 57 a 60 personas”, detalló.
