Rechazan desaparición del programa Escuelas de Tiempo Completo

Al confirmarse el recorte de un 52 por ciento para las Escuelas de Tiempo Completo en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) para el 2020, se desató incertidumbre sobre la permanencia de ese programa, que las autoridades educativas consideraron perjudicial para el alumnado.
El propio secretario de Educación de Tamaulipas, Mario Gómez Monroy, declaró que la medida afectará a 849 planteles en el Estado que brindan clases y alimentación a los estudiantes en horarios que terminan a las cuatro de la tarde, lo que también beneficia a los padres de familia, ya que sus hijos están seguros hasta que ellos salen de su trabajo.

 

Reacciones en contra
Desde el mes pasado, cuando fue presentada la propuesta del PEF hubo reacciones en contra de un posible ajuste de recursos a la baja para dichas instituciones educativas, en especial porque en los últimos tres años ya se habían aplicado recortes que dejaron a la mitad el apoyo económico que se recibía anteriormente.
Fue directamente impactado el rubro llamado “Gestión Escolar”, que ahora se denomina “Fortalecimiento de la equidad y la inclusión”, el cual está etiquetado para aplicarse en mejoras a la infraestructura física de la escuela, compra de equipos u otras necesidades materiales.
Los primeros años desde que inició el programa cada plantel recibía 90 mil pesos anuales, en el 2017 fueron cerca de 70 mil y en el 2018 entre 40 mil y 60 mil pesos, pues el recorte fue mayor para las que tenían más ciclos escolares recibiendo dicho apoyo.

Afectados
Virginia Barrientos Peña, directora de la primaria Primitivo Shears Villarreal, opinó que los más afectados ante un posible cierre de las Escuelas de Tiempo Completo serían los menores de edad, ya que van a estar solos en casa hasta que sus papás lleguen de trabajar, lo cual puede generar múltiples peligros.
Yolanda Cárdenas Sánchez, supervisora de la Zona Siete de Telesecundarias, también rechazó la posibilidad de que el mencionado programa desaparezca, principalmente porque en las comunidades rurales donde se ubican las telesecundarias existe mucha precariedad y hay estudiantes que sólo comen los alimentos que reciben en la escuela.
Por su parte el director de la primaria Franklin D. Roosevelt, Abraham Obregón Hurtado, precisó que si bien los fondos para el rubro de alimentación no se han recortado, tampoco han tenido incremento, aun cuando es necesario porque los comestibles se han encarecido e indicó que en vez de reducir, lo que debería haber es un incremento presupuestal para Tiempo Completo.