Reactivan caso de niña desaparecida gracias a mensaje en un dólar

22/03/2018 – Un billete de un dólar con un mensaje supuestamente escrito por Mikelle Biggs, una niña desaparecida en 1999 en Mesa, Arizona, llevó a la policía a reabrir el caso.

El billete apareció a mil 700 millas de distancia cuando la policía de la localidad de Neenah, en Wisconsin lo recibió, reabriendo la investigación.

El mensaje escrito en los bordes del pale moneda dice:

Mi nombre es Mikel Biggs secuestrada de Mesa AZ estoy viva».

En una inspección más cercana del mensaje se observa que faltan dos letras en el nombre de la niña desaparecida, es por ello que su hermana Kimber Biggs duda de la veracidad del mensaje.

Su nombre era Mikelle, estaba escrito de esa manera y esa era la única forma de deletrearlo», explicó, según USA Today.

Cuando lo miré al principio, pensé: ‘Bueno, tal vez podría ser’. Hay un rayo de esperanza en el que intentas encontrar una razón para que tenga sentido», añadió la hermana, quien publica en un perfil de Facebook información para seguir recabando pistas.

Estaba mirando el billete, tratando de ver la letra y entender si significar algo, y me enfermé al respecto. ‘¿Es esto un engaño? ¿Alguien nos jugó una broma cruel?’, pensé. Eso me hizo enojar».

Dicha pista fue entregada a la Policía de Neenah por un hombre el 14 de marzo, el cual lo halló en un montón de billetes donados a las Girls Scouts que él coordinaba, publicó ABC News.

En caso de que no sea una broma, la policía dijo que es sumamente difícil recoger de esa sola prueba una pista que dé con el destino de la niña, que hoy tendría 30 años de edad.

Mikelle Biggs tenía 11 años de edad cuando desapareció; estaba afuera de su casa esperando un camión de helados y la última vez que se la vio estaba en su bicicleta a unas cuatro cuadras de su hogar.

Según el reporte policial, la niña al parecer estaba huyendo de alguien cuando no se le volvió a ver.

Su desaparición el 2 de enero de 1999 no solo provocó la movilización policial, fue noticias en medios estadunidenses e incluso se hicieron arrestos, pero sin arrojar respuestas.

Agencias