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Integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) resolvieron mantener la «alerta máxima» y ratificar el emplazamiento de paro indefinido en Chiapas.
Profesores chiapanecos aseguraron que tomaron esa decisión porque las respuestas del presidente Andrés Manuel López Obrador y del gobierno estatal son «insuficientes» a sus demandas.
Durante la madrugada, la Asamblea Estatal Permanente de la Sección 7 se reunió y destacó que el acuerdo alcanzado con el Presidente «representa una base importante para la revisión y la posible solución a las demandas».
«El movimiento no debe echar las campanas al vuelo; la resistencia, el emplazamiento y la desobediencia siguen teniendo sentido hasta que no sean resueltas las demandas planteadas», aseveraron.
En los resolutivos, los maestros no mencionan su petición de plazas automáticas para egresados de escuelas Normales; sin embargo, mantienen la «exigencia de la abrogación total de la nueva mal llamada reforma educativa».
Entre sus exigencias está la liberación de seis presos políticos y la cancelación de todas las carpetas de investigación por los conflictos en Escuintla.
Reprueban las agresiones de la Guardia Nacional contra pobladores de esa localidad e insisten en el retiro de los elementos de seguridad.
Los docentes acordaron realizar los llamados «antigritos» la noche del 15 de septiembre en diversos municipios.
El miércoles, profesores de la CNTE se reunirán con autoridades federales y estatales en el palacio de gobierno de Chiapas.
Agencias
