Orbe

El expediente Canturosas llegó a Palacio Nacional

Si el caso de Carmen Lilia Canturosas Villarreal, nativa de Nuevo Laredo y candidata de Morena en Tamaulipas a una diputación plurinominal, es solamente de índole mediático, habría que enfrentar y aclarar las cosas en términos públicos.
Nada se pierde -sino todo lo contrario- salir al paso de los supuestos dimes y diretes, sobre todo cuando esta persona parece estar ubicada, aquí en la entidad, en el tercer sitio de las “pluris” de un partido que predica casi un nuevo evangelio, y cuya figura central es Andrés Manuel López Obrador.
Pero si se trata de un asunto con trasfondo violento, nefasto y despreciable, donde se investiga el homicidio del periodista Carlos Domínguez Rodríguez, ocurrido precisamente en Nuevo Laredo en enero de 2018, entonces el escenario es otro completamente.
Un escenario muy oscuro y tétrico donde si la congruencia y decencia no se han extraviado aún de la dirigencia de Morena en Tamaulipas, lo que urge por lo tanto sería precisar si el nivel moral de sus candidatos es incuestionable o si por algún error en la selección de aspirantes no se hizo lo que se tenía que hacer, poniendo a una persona en un entredicho lamentable.
Y fundamentalmente porque se trata de un asunto que acaba de trascender hasta Palacio Nacional, siendo el propio presidente López Obrador cuestionado sobre las andanzas de sus correligionarios, señalando el tabasqueño -casi en un acto de desesperación- que por los que anden mal no se hace responsable, excepto por su hijo menor, Jesús Ernesto.

¿QUÉ QUISO DECIR EL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA?
¿Acaso el titular del Ejecutivo Federal envió ayer jueves un mensaje claro a las autoridades de Tamaulipas, así como a las de su partido, en el sentido de que él no intervendrá por nadie, a efecto de que se aplique la justicia y el sentido moral contra quienes no merecen ostentar una representación legislativa en el Congreso del Estado?
Este es un expediente que al haber llegado a Palacio Nacional y ventilarse ante importantes medios nacionales, traerá consecuencias inevitables.
Una de ellas es que los ojos que vigilan el proceso contra los autores materiales e intelectuales del crimen contra el periodista Carlos Domínguez, se multiplican exponencialmente.
De hecho, la instrucción presidencial de que el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, reciba de inmediato al hijo del comunicador desaparecido, confirma esa multiplicación.
Todo indica que acostumbrados los mexicanos a sufrir todo ese tipo de tragedias que ni siquiera se envolvían en ambientes sutiles, sino con toda la impunidad que se conoce, iremos a una era de cambio aquí en Tamaulipas y en todo el país.
Estamos hablando de que las convicciones de Andrés Manuel López Obrador como de Francisco García Cabeza de Vaca, de garantizar la justicia para todos, poderosos o débiles, deberá ser ejemplo a seguir en los propios partidos políticos, debiendo estos destacar que al interior de sus organizaciones se actúa con orden, respeto y moral, y cuestionando ante los reflectores de los medios a personas cuyo fuerte son los sucesos fatales y desgraciados.
No cabe duda de que cuando las cosas de este nivel jurídico llegan a niveles muy altos, ventilándose ante millones de personas juicios legales y morales, la visión de los vencidos cambia absolutamente, y cambia obviamente para bien, habituados los mexicanos a que toda tragedia era en los tiempos pasados manejada con una privacidad siniestra y lista a escribir una historia oficial que traicionaba la verdad que todos teníamos derechos a conocer.
Estamos hablando de historias que ya no serán las mentiras de siempre, y simulaciones que a todos nos convertían en perdedores permanentes, excepto a los privilegiados.
Me pregunto si Morena Tamaulipas entiende lo que ayer se dijo abiertamente en Palacio Nacional y si el debate a este respecto debe abrirse junto con los señalamientos que mucha gente merece externar, que no son otra cosa más que mensajes que traerán serias implicaciones contra este partido en los resultados electorales del próximo 2 de junio.

UAT RUMBO A LA UNIVERSIADA 2019
La nota que oxigena es que el rector José Andrés Suárez Fernández abanderó a la delegación deportiva de la UAT que participará en la Universiada Nacional 2019 a celebrarse del 1 al 15 de mayo en Mérida, Yucatán.
Esta delegación está integrada por 36 estudiantes que representarán a la máxima casa de estudios de Tamaulipas en 9 disciplinas. En esta ceremonia el rector Suárez entregó al banderín oficial de la UAT a la esgrimista Alexia Estivali Badillo Herrera, quien la recibió a nombre de todos los atletas universitarios.
¡Feliz fin de semana!