Orbe

AMLO ritualiza el cáncer social

10/09/2018 – “Es más fácil engañar a la gente, que convencerlos que han sido engañados”. Mark Twain.
Las razones políticas que hacen ganar elecciones a ciertos individuos, suelen convertirse (en breve tiempo) en temibles armas contra los propios votantes.
Uno de los discursos que abanderó Andrés Manuel López Obrador en sus tres campañas por la Presidencia de la República fue la promesa de aplicar la justicia.
Esta última que lo llevó -finalmente- a relevar en el Poder Ejecutivo federal a Enrique Peña Nieto, no fue la excepción. Ese AMLO de “la tercera es la vencida” y con grandes afanes justicieros, logró convencer a la gente de que era la mejor alternativa.
El problema es que la autoridad con la que llegará al 1 de diciembre el nuevo presidente podría no ser tan respetable, pues las razones que tanto esgrimió de pronto cambiaron.
Trascendió en días pasados que al llegar a Monterrey, el tabasqueño se aventó una hablada que muchísimos ciudadanos se la cobrarán a Morena en próximas elecciones.
Y todo a pesar que no es fácil que de la noche a la mañana la gente se convenza de que estos ideales anárquicos, son razones suficientes para sublevarse contra una autoridad que bajo engaños se apropió del poder.
Dijo que la transición se está dando en armonía, que no hay crisis económica y que él sólo ve para adelante.
En resumen, esto es lo más notorio dentro de la entrega-recepción EPN-AMLO:
Una transición donde la violencia y los asesinatos son la constante; una crisis económica que afirma el presidente electo no existe, y una postura cómoda de no describir crudamente al país a pesar de la pobreza y la inseguridad.
“Yo no quiero juzgar a nadie, estoy viendo para adelante”, expresó como tratando de atajar la terrible realidad que millones de mexicanos enfrentan a diario, víctimas de la delincuencia y la pobreza.
Y todos estos son, al final, víctimas de la corrupción de quienes estando en el poder han provocado el desastre más grave en la historia moderna del país.
Sin embargo, López Obrador parece ser otro muy distinto al que buscaba los votos antes del 1 de julio. Pues hoy parece ritualizar el cáncer social que destruye a los mexicanos.
Sólo nos resta como sociedad rogar a la divina providencia que con AMLO no se sumen y revuelvan los problemas que él prometió resolver, con los problemas que ya están generando sus declaraciones e intenciones.

RESULTADOS Y POLÍTICA DE CALIDAD
Al contrario de lo que ocurre con el México que se cierne, en Tamaulipas el Gobernador Francisco García Cabeza de Vaca tuvo la semana pasada un período de tiempo muy intenso de resultados y de política de calidad.
El jueves, junto con el presidente Enrique Peña Nieto, el mandatario tamaulipeco inauguró el Libramiento Reynosa Sur II y entregó de forma simbólica la primera etapa de la modernización de la carretera Tampico-Victoria-Límites Estado de Nuevo León.
Ambas obras impactarán y elevarán la competitividad de Tamaulipas en el comercio exterior, en la industria y los servicios.
Ahí en Reynosa se dijo que una gran parte de la inversión extranjera directa ha decidido aterrizar en Tamaulipas. Por su parte, el Gobernador García Cabeza de Vaca señaló que los 37 kilómetros de longitud, 18 pasos superiores, cuatro carriles e igual número de entronques a desnivel del Libramiento Reynosa Sur II, representan grandes beneficios para la región y el país entero, sin pasar por alto que la inversión de mil 600 millones de pesos hecha en esta obra, está ampliamente justificada por sus beneficios.
El Libramiento Reynosa Sur II tendrá un tránsito estimado de 5 mil vehículos diarios, reduciendo el tiempo de recorrido y dando servicio a más de 900 mil habitantes de la región.

REUNIÓN CON LEGISLADORES FEDERALES
Y cerrando esa semana de resultados, el mandatario también se reunió con diputados y senadores que representan a Tamaulipas en el Congreso de la Unión. Sin colores partidistas se acordó trabajar de forma coordinada, en un marco de respeto institucional, en favor de las familias tamaulipecas.
¡Excelente inicio de semana!