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12/08/17.- México rechaza el uso, o amenaza de uso, de la fuerza como posible solución a la crisis en Venezuela, informó la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
Con esta declaración, la Cancillería se opone a la postura de Estados Unidos, establecida por Donald Trump, quien dijo que —de ser necesario— considerará una intervención militar.
“La crisis en Venezuela no puede resolverse mediante acciones militares, internas o externas”, dice el comunicado de la SRE.
El pasado 8 de agosto, México y otros 11 países adoptaron la Declaración de Lima, la cual afirma que no se reconocerán las decisiones tomadas por la Asamblea Nacional Constituyente del país sudamericano y reprueba la violencia y el uso de la fuerza.
En cambio, el gobierno mexicano ofrece su esfuerzo diplomático para “restaurar la democracia en Venezuela a través de una salida pacífica y negociada”.
En más de cuatro meses de protestas contra el gobierno de Nicolás Maduro, los disturbios y la represión de las autoridades arrojan un saldo de, por lo menos, 125 muertos.
Otros países de América Latina rechazaron también el uso de la fuerza:
«Rechazamos medidas militares y el uso de la fuerza en el sistema internacional. Todas las medidas deben darse sobre el respeto de la soberanía de Venezuela a través de soluciones pacíficas», indicó la Cancillería de Colombia.
Para el gobierno de Perú, «la única vía aceptable para recobrar la democracia» es el diálogo, mientras que para el bloque Mercosur —integrado por Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay— el único instrumento aceptable para la «promoción de la democracia» es «diálogo y diplomacia».
Agencias
