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La elección del miedo
4/03/2019 – Los reclamos a la alegoría al “día de brujas”, en relación con la escena política doméstica contemporánea, se refieren a que en aquella siempre se ofrece el “dulce o truco” -treat or trick- y acá, no se dejan opciones.
En los corrillos del partido MORENA, algún eco tuvieron las expresiones del embajador del líder senatorial, RICARDO MONREAL ÁVILA, su suplente ALEJANDRO ROJAS DÍAZ DURÁN, remitiendo a una hipotética intromisión del “PAN-Gobierno estatal”, el desenlace de la depuración de la lista de aspirantes a las candidaturas para las diputaciones locales de mayoría tamaulipecas.
Antes, en el PRI también hubo quienes cuestionaron el bajo perfil del grueso de los nominados a los mismos cargos, sembrando la duda del “sospechosismo”, sobre pretendidas concesiones en torno de la dirigencia estatal personificada por YAHLEEL ABDALÁ CARMONA.
Entre la advertencia del ex presidente LÓPEZ MATEOS -“nadie aguanta un cañonazo de 50 mil pesos” de aquellos- y los rescoldos de la mitología urbana liberada en la pasada elección, hablando de asaltos, amagos y levantones, no han faltado quienes han concedido cariz de “natural” al encauzamiento de las nominaciones en ciernes.
Sin los pelos de la burra en la mano sobre ello, concederé los visos del temor que si ha asomado en este proceso electoral, en la etapa interna de las decisiones partidistas.
Los conocidos y reconocidos cuadros priístas con capitales bastantes, no aparecieron en la puja por las candidaturas de su partido, por los temores fundados de que tales inversiones significaban de alto riesgo, como para perderse.
Muchos de ellos que vieron más posibilidades de éxito en MORENA, intentaron migrar sus capitales a esa empresa política, pero recularon cuando se dieron cuenta que no se les pondría en charola de plata, como esperaban.
En el apartado del llamado PEJE-partido, también el miedo ha asaltado, pero a más altos niveles del andamiaje estructural.
Lo que teme el pastor en la Cámara Alta, es que la dirigente nacional del partido, YEIDCKOL POLEVNSKY, le gane reflectores y bases de apoyo, camino de la siguiente sucesión presidencial, y viceversa; en esas disputas traen la escena interna electoral tamaulipeca.
Sin detrimento de los compromisos que ROJAS-MONREAL traigan con la senadora LUPITA COVARRUBIAS, los alcaldes ADRIÁN OSEGUERA de Madero y MARIO LÓPEZ de Matamoros, así como el ex neolaredense CARLOS CANTUROSAS, la intención es de más largo aliento.
Viendo la paja, no han caído en la cuenta que la viga de la descalificación interna, estrecha el horizonte general, fortaleciendo al competidor de enfrente.
Igual se entrampó la disputa por las candidaturas mismas, donde los activistas fundadores del partido, confrontaron a los venidos de fuera, el derecho a la nominación; temían fueran los receptáculos de las inercias que piensan, van a acarrearles los votos en automático, sean o no conocidos, hagan o no campaña, como pasó en la elección presidencial reciente.
Por ello, también los panistas han andado apanicados en esta etapa del proceso.
Los perfiles de los presuntos nominados, en general, no se acercan ni poquito a la estatura de tribunos, parlamentarios y en la papeleta, con carácter de prioritarios, por el nivel de cercanía con el liderazgo político actuante, se cuentan con los dedos de la mano.
Si a algo le apostaría un ente partidista-gubernamental en los escenarios inciertos que transitamos, sería a que un congreso de cuño distinto, fuera si no dócil, al menos no alebrestado.
