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Ni tanto que no lo alumbre
5/11/2018 – En menudo brete se metió el diputado local HILARIO GONZÁLEZ GARCÍA, queriéndose aparecer como justiciero, defensor de los intereses del pueblo, para condenar la demanda de los regidores matamorenses, porque se les mejore las percepciones.
De entrada ya se echó al cuello a activistas de la talla del dirigente local petista, IVÁN PUENTE, integrante del flamante cuerpo edilicio, junto con su hija, quien airadamente le ha reclamado su posición, sin sustentarla y repasando la ausencia de talentos y haberes para estar donde está.
“Como regidor -en la antepasada administración- no hizo nada y va por las mismas ahora que entró en lugar de CARLOS GARCÍA al Congreso local”, dice aquel, quien remite a “la displicencia” para con el dirigente estatal del partido, KIKO ELIZONDO, los cargos conseguidos por HILARIO.
Lo cierto es que los emolumentos de los representantes populares y de los servidores públicos siempre ha sido tan controversial, como opaco y en el caso de Matamoros, no está todo lo que es… ni es todo lo que está.
Los ediles de la heroica, en efecto, serán quienes menos ganan, de los municipios más grandes de la entidad y de varios mucho más pequeños, aunque eso sea sólo como herencia del torcido ex alcalde CHUCHÍN DE LA GARZA DÍAZ DEL GUANTE.
La página electrónica de la anterior administración municipal matamorense, fue de las que más presumió en transparencia, pero la mayoría de los rubros obligados eran inaccesibles y su presupuesto de egresos para este año -publicado en el Periódico Oficial del Estado- es el más pequeño -entre los 43-, con solo cuatro páginas, ocultando la mayoría de las cifras obligadas, incluido el tabulador salarial de los servidores públicos.
Por eso el nuevo cabildo solo sabe que a los regidores tenían un salario asignado de 35 mil pesos, pero desconoce de compensaciones y prestaciones, así que “con eso se andan quedando”.
En Victoria, presupuesto y página establecen que un regidor gana 55 mil 759 pesos mensuales y en Madero 55 mil; en Altamira son 41 mil 388 pesos los que este año gana un regidor, con los incrementos que se han aplicado los dos últimos años.
Tampico “para no errarle”, estableció techos amplios de diferenciación, entre 35 y 98 mil pesos, las variantes para pagarle a sus regidores, en función de qué, la alcaldesa que se fue sabrá y el que llegó aplicará a discreción.
Los de Matamoros se quieren comparar con los de Reynosa y Nuevo Laredo, cuando hablan de homologación, pero aún entre ellos hay, o parece haber, diferencias abismales.
Reynosa no precisa cuánto ganan sus regidores, pero deja abierto un abanico de entre 41 mil y 55 mil, mientras Nuevo Laredo, de mínimos a máximos, sumando percepciones ordinarias, extraordinarias y compensaciones, va de los 115 mil a los 145 mil pesos, aunque su alcalde, reporta pagos totales en el año por un millón 173 mil pesos, que harían 98 mil mensuales; menos que aquellos.
Cosa por demás “extraña”, porque en el 2 mil 8, el Congreso local estableció un tabulador tope de las remuneraciones de síndicos y regidores, de acuerdo a la población de cada ínsula y el más alto, corresponde a los 5 que siguen teniendo más de 250 mil habitantes, topado en los 606 salarios mínimos generales, es decir 53 mil 350 pesos, en números cerrados.
Casi 5 mil pesos habría que quitarle a tal tarifa si nos remitimos a la primicia de que ya todo se tasa en UMAs (Unidades de Medida y Actualización), 8 pesos por abajo del salario mínimo general.
